|
|
|
|
|
|
|
Las entradas para ver a Nito se consiguen en Dimensión 3, Entre Ríos y Mitre |
|
|
|
|
|
Por una conjunción de casualidades, Nito Mestre pudo brindar una conferencia previa a la proyección del clásico rockumental "Adiós Sui Generis", registrado exactamente 33 años atrás, ayer por la tarde en la medioteca.
La ocasión correspondía al cierre del ciclo "ExpresArte", el ciclo de películas organizado por el área Juventud sobre Derechos Humanos y Jóvenes. A la efemérides exacta del filme se le sumó la gira que realiza Mestre por nuestra provincia: hoy está en Córdoba, el domingo en nuestra ciudad, en el auditorio Sobral a las 21.
Ante una platea colmada de adolescentes y jóvenes, el cantante folk recordó pasajes de aquel hito histórico del rock nacional, a través de las preguntas que los periodistas (quienes lo esperaron una hora) le ofrecían. "Cuando lo veo pienso qué chiquito que era, demasiado pibe, aunque está bien que haya sido así. Quisiera trasladar parte de mi madurez a esa época para verla nuevamente. Recuerdo que no había vallas entre el público y el escenario y eso habla del respeto que había, donde nadie invadía. Pero también reconozco cosas técnicas rudimentarias como el sonido. Los que filmaban, por ejemplo, tenían una o dos cámaras y corrían con la cinta de un lado a otro. No tenían real dimensión de lo que luego eso significaría. Pensar que pasamos generaciones tras generaciones, hasta hoy, por el boca a boca, por una complicidad inexplicable con la gente. Luego por los medios, que ni estaban enterados de nosotros hasta el último recital. También las escuelas que mucho usan nuestras canciones para enseñar guitarra e Internet, claro".
Legado: "Musical e ideológicamente no hay parecidos en la actualidad pero sí influencia en todos, porque si no ninguna banda hubiera existido".
Separación: "Nos separamos por aburrimiento, pero con Charly seguimos siendo como hermanitos. Con Rinaldo (Rafanelli) y Juan (Rodríguez) era diferente el tema, a ellos los veo esporádicamente".
"Sinfonía, una cagada": "El disco del regreso, Sinfonía para adolescentes (2000) que hicimos en Boca, fue una cagada. Terminó como una pasta pasada. Yo le dije a Charly que había músicos que no estaban a la altura, pero por una cosa afectiva los dejó. Después al tiempo me hizo caso y armó una banda tipo GIT con los tres chilenos que hacían sus covers".
Rebelión: "En aquella época, nos rebelábamos contra un enemigo que era la censura y la dictadura. Ahora hay muchas cosas por las cuales rebelarse. Por supuesto en aquel momento teníamos que decir lo que pensábamos pero con otras palabras, como más suave".
La vuelta. "En 2009 volvemos con Charly, cuando haya salido de su situación actual. Con él es siempre, sin intermediarios".
Otras notas de la seccion Horas Libres
Doña Jovita viene a “gambetear pecados”
Improvisaciones
Con superpoderes
Presentan antología poética
Cerca de 4 mil espectadores pasaron en julio en el INCAA
|