La Policía de Villa María detuvo ayer a un productor agropecuario que está sospechado de haber abusado sexualmente de una menor, en un hecho registrado a comienzos de año.
Apenas pasadas las 9.30 de la mañana, efectivos de la División Investigaciones de la Unidad Departamental General San Martín se hicieron presentes en la vivienda ubicada en Naciones Unidas 175 y aprehendieron a Jorge Sebastián Russo, de 53 años de edad, quien fue trasladado a la Comisaría de Distrito local, donde quedó alojado.
La orden de detención fue librada por el fiscal Gustavo Atienza, quien imputó a Russo como presunto autor del delito de “abuso sexual gravemente ultrajante”, del que habría resultado víctima una nena de 8 años, cuya madre radicó grave denuncia en los últimos días.
Precisamente el investigador judicial, asistido por la secretaria Olga Oyola, tiene a su cargo la instrucción de la causa, ya que se encuentra al frente de la Fiscalía de Feria desde el 1 de enero cuando se inició el habitual receso de verano.
Extraoficialmente, trascendió que la chiquita relató en sede tribunalicia que Russo la sometió a tocamientos y manoseos, además de inducirla a realizar otras prácticas sexuales de tipo oral.
En tanto, y de manera muy escueta, la autoridad policial informó anoche que personal de la citada dependencia se constituyó a las 9.35 en un domicilio de Naciones Unidas al 100, donde procedió a la aprehensión de un hombre de 53 años por estar acusado como supuesto autor del ilícito antes mencionado en perjuicio de una menor.
Pese al hermetismo con que se manejó el caso, tanto por parte de la Justicia como de la Policía, EL DIARIO pudo averiguar entre algunos vecinos del barrio General Güemes que Russo “tiene una buena posición económica” y es propietario de “dos o tres campos”, además de haber adquirido hace poco tiempo una valiosa camioneta de fabricación japonesa.

@ El marco legal

Si bien el proceso judicial se encuentra en etapa investigativa, la orden de detención librada por Atienza evidencia que existirían pruebas más que convincentes como para imputar al hombre de campo del grave delito que se le atribuye, y que es legislado por el artículo 119 del Código Penal de la Nación.
Dicha norma legal establece inicialmente que “será reprimido con reclusión o prisión de seis meses a cuatro años el que abusare sexualmente de persona de uno u otro sexo cuando ésta fuera menor de 13 años, o cuando mediare violencia, amenaza, abuso coactivo o intimidatorio de una relación de dependencia, de autoridad, o de poder, o aprovechándose de que la víctima por cualquier causa no haya podido consentir libremente la acción”.
Sin embargo, el segundo párrafo del citado artículo precisa que “la pena será de cuatro a 10 años de reclusión o prisión cuando el abuso, por su duración o circunstancias de su realización, hubiere configurado un sometimiento sexual gravemente ultrajante para la víctima”.