"Tengo más facilidad para cantar que para hablar. De a poco me voy destrabando hasta que me conecto con la gente. Aunque aquí es como si fuera un escenario", confesó ante más de doscientas personas la prestigiosa cantante Estela Raval, ayer por la tarde en la Medioteca Mariano Moreno.
Con sencillez y templanza en la voz, la legendaria vocalista recibió el homenaje a la trayectoria organizado por la municipalidad villamariense, acompañada de sus compañeros de viaje y carrera, Los Cinco Latinos.
Presentada por el conductor Héctor Cavagliato y secundada por el intendente Eduardo Accastello, Raval extendió sus agradecimientos a nuestra ciudad, a su público y a "Dios y a la vida".
"Creo que es merecido lo que recibo como premio. Y esto no es vanidad, sino que en verdad en estos últimos siete años he recibido tantas cosas que hacen que me mantenga en pie. Mientras haya vida habrá esperanza", reflexionó.
"Pero lo que más me importa es que estos reconocimientos me lo hagan en mi país. Porque tengo el placer de haber nacido aquí, vivido aquí y, algún día, morir aquí", añadió. Momentos antes, Accastello había recordado que dicho galardón había sido entregado dos años atrás a Mercedes Sosa y en 2009 a La Mona Jiménez. En un pequeño furcio, el mandatario indicó a "el Negro" Jiménez, pero pasó desapercibido. "Esta es una ciudad amiga, que premia a los seres humanos. Y usted, más allá de ser una gran artista, ha sido una persona que nos ha dado tanto cantándole al amor y a los sueños en Argentina como en América Latina", precisó el jefe comunal.
También dedicó un párrafo para Los Cinco Latinos, quienes acompañaban a la artista en el sillón ubicado en el hall de la medioteca. Raval, a modo de sorna, indicó: "Véalos, están intactos".

Dos temas de regalo

Tras recibir una plaqueta recordatoria y un ramo de flores, la homenajeada fue agasajada con la interpretación de dos de sus temas clásicos de repertorio por artistas locales. El trompetista Tucho Olivero recreó la conocida "Balada de la trompeta", con un coro final a cargo de Los Cinco Latinos a pleno. Luego, el cantor José Morales entregó una más que sentida versión de "A mi manera".
Todavía envalentonado por su performance, Morales pidió prestado el micrófono para contarle a Estela que conoció a su hermano, Manolo Raval, en Río Gallegos. La cantante replicó: "Era un gran músico, un maestro del bandoneón y mi maestro, porque es quien yo he seguido en la música. Ahora nos estará mirando allá en el cielo", indicó.
Por último, Raval regaló la canción romántica "Para vivir un gran amor" de Cacho Castaña y, a pedido del público, "Resistiré".