El médico villamariense Oscar Alberto Dávila comenzará a ser juzgado el próximo lunes en los Tribunales de la ciudad de Río Tercero por el crimen de su ex esposa, la fisioterapeuta Marisel Pons.
Dávila, de 42 años de edad, se encuentra detenido desde mediados de abril de 2008 y comparecerá imputado como presunto autor de "homicidio calificado por el vínculo", delito que es castigado con prisión perpetua.
Precisamente por tratarse de un hecho que tiene como única máxima pena prevista por la legislación argentina, el juicio oral y público se realizará con un jurado popular y se llevará a cabo en la sala de audiencias de la Cámara del Crimen riotercerense.
Según informó ayer la emisora RH1 de Hernando (de donde era oriunda la víctima), la primera audiencia de debate se iniciará a las 9 y el tribunal será presidido por el camarista César Barberis, quien estará acompañado por dos jueves civiles. Esto se debe a que el titular de dicha Cámara, José Luis Clemente, se apartó de intervenir en este proceso, mientras que el otro cargo estaba vacante.
Los tres jueces técnicos serán acompañados por los integrantes del jurado popular, constituido por 12 ciudadanos (ocho titulares y cuatro suplentes), que ya fueron designados por sorteo, quienes tendrán la responsabilidad de determinar si Dávila es inocente o culpable.
El conocido traumatólogo local será defendido en el juicio por los abogados Marcelo Martín Silvano, de Villa María, y Alberto Vieytez Monroy, de Río Tercero.
Cabe recordar que Marisel Pons, de 37 años, fue encontrada muerta por su hijo mayor el 26 de marzo de 2008, en el consultorio que atendía en 12 de Octubre 135, en la ciudad de Hernando. En un principio todo parecía indicar que la fisioterapeuta se había quitado la vida, colgándose con una soga. Pero como se plantearon muchos interrogantes, la causa se caratuló inicialmente como "muerte de etiología dudosa".
Sin embargo, la investigación puso a Dávila en el centro de la escena hasta que, finalmente, la Justicia lo acusó por el hecho el 12 de abril y ordenó su captura, aunque el traumatólogo se entregó tres días después.
La pareja estaba separada de hecho desde varios meses antes del hecho.