Cuarta y última entrega del Suplemento del Festival y por ende la postrera de este servidor. No sé por dónde empezar, aunque temas no me falten. Tal vez deba comenzar por secarme las plumas, porque parece que se le ha dado por llover por todos los años que no llovió antes. Y es que encima, a los artistas se les da por tentar al diablo que siempre anda buscando dónde meter la cola. Y así fue cómo Cacho Castaña y Valeria Lynch cantaron un tema del dúo de los hermanitos Galán y de yapa, Castaña nombró en un tema al inefable J. R., el cantautor rengo, dueño de una proverbial fama de mufa. Y bueno, qué quiere compadre, así, no hay paraguas que aguante.
La primera señal fue que se trabó el telón y no iba ni para atrás ni para adelante.
Y es que el autor de Garganta con arena coquetea permanentemente con el peligro, como si vivir al filo de la navaja lo estimulara. No hace tanto que zafó de la parca entre pulmotores y así, sin decir "agua va" (ni a propósito el uso del dicho popular, che) lo invitó a cantar a José Manuel de la Sota, que anda incursionando en la música y grabó un tema de Cacho, titulado "Y apareciste tú", dedicado a Schiaretti. Por suerte, el ex gobernador no vino, si no, no quiero ni pensar la payada que se hubiera armado con el intendente Accastello. Porque, como el mismo Cacho Castaña dijo en la carpa de Prensa, "el Gallego es bravo". ¡Ja, chocolate por la noticia! ¡A nosotros los cordobeses nos viene a decir eso! ¿No te digo yo? Estos porteños se creen que inventaron el agua tibia.
Y ya que hablamos de músicos y políticos, no podemos soslayar el paso por el escenario Hernán Figueroa Reyes del rey de Tucumán, cantautor y gobernador, empresario y salvador de almas en pena: Sí, prrrrrrrr, ¡jajay! ¡Ramón "Palitoooo" Ortega! Era como el regreso de los muertos vivos, vea. Un fenómeno increíble. Los temas de Palito ya eran fieros en la década del ‘60, con letras más infantiles que "cucú, cucú, cantaba la rana", calcule usted en 2010, cuando tanta agua ha pasado bajo el puente. ¡Y tocó la batería! La verdad es que no me explico cómo podemos comprar tanto humo, allí donde no hay ni medio choripán. ¡Palito Ortega! ¡Dejate de joder! ¿No será que está en campaña de nuevo, no? Y como dijo Cacho Buenaventura, cuando actuaron junto a Jairo, cerrando el Festival ante unas 500 almas empapadas que hicieron el aguante hasta que las velas no ardieron, porque las apagó la lluvia. "Palito cantaba La felicidad, ja ja ja ja, mientras llovía. ¡Cómo no se va a cargar de risa si tiene los campos sembrados de soja!".
El que estaba chocho disfrutando del show de Ortega era el Patrón, mezclado entre el público, con su característico perfil bajo (nada de pilchas llamativas ni qué ocho cuartos, sólo llevaba puesta la máscara de Chespirito), apoyado en una columna, ahí estaba el gran hacedor y empresario. Y fue justamente homenajeado por Sadaic el Patrón, en reconocimiento por haberle dado la oportunidad a tantos artistas. Y la verdad, es que en eso se parece a Walt Disney, porque es cierto que ha hecho cantar a cada animal...
Pero dejemos la zona de plateas y vayamos nuevamente a la carpa de Prensa, que parece que hay anuncios importantes.
Y ahí estaba, dando primicias, el intendente Accastello. Dos periodistas hablaban entre sí y especulaban, que para eso son mandados a hacer: "¿Se estará por dedicar la música?".
- "Puede ser. Se comenta que aprendió a tocar la caja."
- "¿Va a cantar coplas y vidalas?
- "¡No, no, la caja fuerte!"
- "Ah, bueno..."
Pero no, lo que el intendente fue a anunciar es que va a techar el Anfi (tarde piaste) y que se abre la licitación para ver quién se querrá hacer cargo de organizar el Festival de Festivales de ahora en más.
Y yo estoy tentado de presentarme a la licitación; pero me parece que Rony tiene todas las fichas puestas.
De todos modos, de agarrarlo yo, muchas cosas cambiarían.
Por empezar, creo que es hora de levantar la puntería con los números que pisen el escenario mayor, porque hoy por hoy, salvo honrosas excepciones, las peñas están casi al mismo nivel artístico que el Anfi. Y eso está bueno, para las peñas, pero para el Hernán Figueroa Reyes... Pero ¿quién le pone el cascabel al gato? ¿Quién se anima a pegar el salto? ¿Quién será capaz de invertir lo que hace falta? Me parece que al Festival le pasa lo mismo que a Alumni: si se pone las pilas, puede ascender a la B Nacional; pero, si el que maneja el quiosco no invierte en caramelos, se va a quedar peleando a duras penas la categoría.
Y en una de ésas es que somos así nomás, cabeza ‘e chancho, y nacimos para pito, y no pito catalán sino de esos pitos que nunca llegan a corneta.
Pero, a la hora del balance, de lo que no me cabe dudas es de que el 10, excelente, felicitado y honoris causa se lo lleva la gente, el público, el aguante. Y eso, Cacho Buenaventura y Jairo, que son tipos que no comen vidrio (en el caso de Cacho, debe ser lo único que no come), lo saben y lo reconocen. Por eso se quedaron hasta pasadas las 4 de la matina sobre el escenario, para deleitar a esa gente que le pone ganas y huevo a la fiesta. Ese es el pacto que jamás se debe romper. El matrimonio entre los verdaderos artistas y nosotros, la gente , el populacho, el aguante.
El que sepa entender y respetar eso, sabrá llevar a buen puerto, por las aguas del Ctalamochita hacia el mundo entero, este evento que ya cuenta con 43 años cumplidos. La pregunta es: después del Patrón ¿quién se banca la parada?