Dirigentes locales alineados en la Federación de Obreros y Empleados de Estaciones de Servicio (Foesgra), advirtieron que de no producirse avances en la negociación por recomposición salarial, llevarían adelante un paro de 24 ó 48 horas en los próximos días.
En diálogo con EL DIARIO, los sindicalistas Luis Domínguez y Jorge Aráoz, brindaron un panorama de la crítica situación por la que atraviesan los trabajadores del sector.
En este sentido informaron que los empleados perciben, de bolsillo, unos 1.600 pesos.
“Sin desmerecer a nadie, los jubilados ganan más que nosotros que estamos en plena actividad. Es una barbaridad y por ello le daremos potencia a nuestro reclamo”, coincidieron en remarcar Domínguez y Aráoz.
“Son inadmisibles los sueldos que tenemos. Con la inflación que existe, los precios suben y nuestros ingresos se quedan”, acotaron.
“Las negociaciones se están realizando con la patronal en Buenos Aires y próximamente tendremos novedades; de no ser positivas vamos al paro”, indicaron.
“Todo esto ocurre por la pobre presencia sindical que tenemos en las estaciones”, lanzaron los entrevistados apuntando al Sindicato de Petroleros de Córdoba (SinPeCor) conducido por Jorge Borelli y al cual el grupo sindical liderado por el cordobés Leandro Arévalo se opone.
“Borelli tiene más una empresa que un sindicato”, fustigaron los dirigentes al tiempo que recordaron los dividendos que embolsa el sindicato de petroleros a través de, por ejemplo, el alquiler de un hotel en pleno centro de la capital provincial y el manejo de cabañas y colonias de vacaciones en las serranías cordobesas.
“Por la pasividad y la inactividad del gremio que hace 60 años dice contener a los trabajadores estamos como estamos. Las cosas tienen que cambiar y nosotros vamos a colaborar al respecto”, advirtieron.
Cabe remarcar que el sindicato de petroleros y otro de la provincia de Mendoza, se han mantenido al margen de la negociación por los haberes.
“En Villa María le suceden muchas cosas a los trabajadores y no tienen a quién recurrir. Por otros intereses (económicos) se han olvidado totalmente de la gente”, subrayaron los consultados.
Otra de las situaciones que molestan a los representantes gremiales es el constante aumento de los combustibles y su escasa incidencia en los sueldos de los empleados.
“Las naftas han aumentado, en el último mes, hasta tres veces y nosotros no recibimos nada de todo eso”, argumentaron los reporteados por este matutino.