El mago de la oscuridad naif Tim Burton, regresa a lo que sabe hacer, recrear su mundo, con el cuento clásico de Lewis Carroll (seudónimo de Charles Lutwidge Dodgson) "Alicia en el país de las maravillas" que desde 1903 fue letra de adaptación para la cinematografía. Yendo desde la versión surrealista del checo Jan Svankmajer a las 20 versiones en cine, más otras tantas en los canales de cables. Si bien la novela llevada al cine no fue bien recibida en primera instancia, en los años ‘60 y ‘70 se rescató debido a su look hippie por su estética psicodélica, así también, Burton declaró que no fue muy fanático de la novela, sino que lo único que lo atrajo fue su banda y las canciones. Ahora bien, si uno observa el cuento original, que retrata el viaje de una niña, que dormida, se deja llevar por un conejo blanco a un mundo desconocido, bien podríamos decir que es para que lo filme el "dark" Tim; y fue aceptado al proponérsele una versión libre y darle rienda suelta al príncipe oscuro, para jugar con su dinámica imaginativa surrealista.
Con los cambios aceptados, la guionista Linda Woolverton, alteró algunos detalles, ahora el lugar no es más "El país de las maravillas", sino una "infratierra", más underground, con personajes más extraños y dementes. Alicia ya no es más una niña, sino una adolescente de 19 años que regresa al mundo mágico que visitó cuando niña para reencontrarse con sus amigos de la infancia: el conejo blanco, los delirantes mellizos Twidli Dim y Twidli Dum, el Lirón, la oruga, el gato sonriente y el sombrero loco, interpretado por Johnny Deep. Alicia tampoco, es la que escapa en sus sueños de las obligaciones escolares, sino que lo hace para aislarse de un matrimonio por conveniencia, producto de una cultura mandante como la victoriana.

El hombre lobo

Benicio Del Toro encarna a Lawrence Talbot, un noble que vuelve a los bosques de Blackmoor para investigar la desaparición de su hermano y hacer las pases con su padre (Anthony Hopkins).
Décadas en superar el horrible trance de la muerte de su madre, regresa a pedido de la novia de su hermano, que le ruega que la ayude a buscar a su prometido. En el lugar se entera que algo horrible está sucediendo, lo mismo que el inspector de Scotland Yard Hugo Weaving, que está investigando una serie de desapariciones brutales, a través de algo salvaje e insaciable de sangre que ha matado a varios campesinos.
Las piezas empiezan ha encajar en un sangriento rompecabezas, donde una antigua maldición convierte a las víctimas en hombres lobo en las noches de luna llena.
Lawrence Talbot debe destruir a la temible criatura que se esconde en los bosques, pero descubrirá que él también tiene un lado primitivo que ni siquiera podía imaginar.

Hada por accidente

Derek Thompson, es un impetuoso jugador de hockey, cuyo apodo es "Tooth Fairy", algo parecido a lo que aquí se conoce como el ratón Pérez, sucede que el mote es porque en cada partido deja sin dentadura a los contrincantes. Cuando Derek deja por el suelo los sueños de un chico, se ve convertido en la "Hada de los dientes" durante una semana, con el añadido de que tiene que llevar el correspondiente atuendo de tutú, alas y varita mágica.
También en cartelera: Papás a la fuerza y Avatar.