La delegada de trabajadores de la Municipalidad de Villa Nueva, Mónica Gramaglia, tildó ayer de “mentirosa” a la secretaria de Gobierno, Sandra Bossa, quien en la edición del jueves le dijo a EL DIARIO que no existió ningún convenio con la trabajadora y que por eso se le descontó casi la totalidad de sus haberes luego de obtener un adelanto de sueldo, hecho que causó un pleito judicial.
Como se conoce, Gramaglia acusó ante la Justicia Laboral al Gobierno de Guillermo Cavagnero por considerar que hubo discriminación sindical, luego que le descontaran una suma de dinero de casi 1.000 pesos “violando el pacto de 200 pesos mensuales”. La delegada había deslizado que el excesivo descuento se produjo en represalia por sus declaraciones en contra del Ejecutivo, pero Bossa sostuvo el jueves que “Gramaglia está haciendo política”.
Ayer, la representante de los empleados pidió derecho a réplica y sostuvo que “la Justicia tiene todos los documentos firmados en los que se pacta que habrá un descuento mensual de 200 pesos”. “Los tengo a disposición de quien quiera verlos”, agregó.
Afirmó que una ordenanza faculta a los trabajadores a pedir un adelanto de haberes en caso de enfermedad y remarcó que “todos saben que mi hijo está en silla de ruedas”.
“Estoy decidida a iniciar una demanda a Bossa en calidad de ciudadana, porque sigue teniendo una conducta de discriminación hacia mi persona, además de ser inoperante y actuar con ignorancia. Sigo teniendo fe en la Justicia”, expresó.