Mauro Fuente parece tener el olfato impecable.
En el inicio del torneo oficial de la Liga Villamariense, el delantero convirtió el domingo tres goles en el triunfo de Argentino (4-2) sobre 9 de Julio de Pasco y demostró, una vez más, que su presencia no es una más.
Con 25 años, este flaco villamariense forma parte de un grupo selecto que no abunda.
Posee más técnica que fuerza, aunque suele ganar en el cuerpo a cuerpo merced a picardía, sin olvidarse de lo más preciado: la pelota.
El domingo lo supo y lo sufrió el conjunto de Pasco, al ver cómo el delantero que parece desgarbado lastima como pocos. Se acomoda en tres cuartos con sus piernas largas para llevarla atada con el pie derecho y definir con el zurdo, como hizo en el primer gol. Convierte sin problemas un penal, como en el segundo (por más que enfrente se ubique un especialista en el tema como Diego Fantino), si no se hace el espacio en el área para recibir un centro, dormirla a centímetros y trasladarla a la red con un toque, como en el tercero de su cuenta personal, en Plaza Ocampo.
“Desde mi punto de vista, tenemos al mejor nueve de la Liga”, asegura Claudio Andrada, otro de los “distintos” que juega para Argentino.
“Lo de Fuente es puro mérito de él, que tiene unas condiciones enormes y del cual dependemos mucho para ver qué logramos este año”, comenta Christian Romero, el técnico del conjunto villamariense.
Pero más allá de los elogios, el flaco mantiene un perfil bajo.
“Por suerte se dio que ganamos y, en lo personal, estoy muy contento por los tres goles”, contó el domingo, en diálogo con EL DIARIO.
“Nueve de Julio juega muy bien a la pelota y de local se hará fuerte, por eso creo que ganamos un buen partido”, comentó después de la victoria.
Al mismo tiempo, el goleador se entusiasma, no por su buen arranque, sino más bien por lo que posee Argentino.
“Tenemos un plantel con promedio entre 20 y 28 años, con jugadores jóvenes, pero que tienen un buen rodaje como para pelear algo importante”, afirmó.
En ese aspecto, contó: “Apuntamos a clasificar y después veremos si podemos aspirar al campeonato”.
Para ello, claro está, como reza Romero, sus goles serán importantes.
“La venía metiendo en el torneo anterior, pero esta vez se me dio tres veces, mucho también por mis compañeros que me asisten. Ojalá que sigamos así”, expresó el atacante.
Destacar a sus compañeros también vale la pena.
El equipo albiazul parece mostrar este año jugadores hechos y con hambre de gloria, tales los casos del propio “Pelé” Andrada, Gabriel Gonella, Carlos Jacobi o Cristian Fernández.
El caso es que el torneo local recién comienza y, para Romero, el equipo tiene como para rendir más todavía.
“Por ser el primer partido, superamos las expectativas; mi laburo es para armar el equipo, armar el trabajo táctico y plantear un partido, pero los que entran a la cancha son los jugadores, son ellos los que resuelven y ojalá que tengamos un buen torneo”, redondeó el técnico, feliz por la victoria y, por supuesto, por las tres pepas del delantero que vio crecer desde las inferiores del club y hoy es una saludable realidad.