El fiscal de Instrucción del Primer Turno, Felix Martínez, tomará hoy declaración a dos testigos en relación con la causa por la que se investiga el crimen de Pablo Ramírez, perpetrado el jueves 7 de agosto por la noche.
Por el hecho quedó detenido un chico de 17 años, quien permanece alojado en un instituto para menores, de máxima seguridad, de la capital provincial.
Los testigos que comparecerán ante el fiscal Martínez fueron propuestos por la defensa y es de suponer que aportarán datos tendientes a atenuar el hecho que se le atribuye al único detenido.

@ Pericias

Por otra parte, Martínez recibirá hoy los resultados de una pericia realizada por el Laboratorio de Química Legal de Córdoba, y con esos datos en la mano, es casi seguro que se apartaría de la investigación y que ésta quedaría enteramente en manos del Juzgado de Menores de esta ciudad.
Es que, en un principio, la Fiscalía no descartó la hipótesis de que en el asesinato pudiese estar involucrado también un mayor de edad, quien había mantenido algunas disputas con la víctima.
Oportunamente, a este sospechoso se le practicó un dermotest que resultó negativo y se le secuestró una campera para ver si en ella había manchas de sangre que lo implicaran.
Los resultados de este estudio obrarán hoy en poder del fiscal.
De resultar negativos -y aparentemente así sería- el funcionario judicial no tendría ya nada que hacer en esta investigación.
“En tal caso, me declararía incompetente y me apartaría de la investigación ya que el único sospechoso es menor”.
Consultado sobre si no caben dudas de que el menor sería el autor, el fiscal se limitó a mencionar que “hay sobradas pruebas de que sería el autor, pero el proceso debe continuar su curso normal”, expresó Martínez.
A más de un mes de ocurrido el crimen que conmocionó a toda la ciudad, la Justicia da un paso más en el esclarecimiento del hecho.