Señor director:
El golpe de Estado del 24 de marzo de 1976 fue un golpe cívico-militar, es decir que una parte de la sociedad lo apoyó y lo avaló. Con el tiempo hemos sabido de empresarios que denunciaban a sus trabajadores, de sindicalistas que hicieron lo mismo con sus compañeros, incluso la Iglesia y los partidos políticos no pudieron escapar a dicha metodología..., que ya estaba implementando el Gobierno de Isabel Perón con la Triple A y secuaces.
Aunque en algunos momentos de nuestra democracia haya sido difícil entender que funcionarios de la dictadura genocida hayan ocupado cargos como gobernadores (ejemplo: De la Sota en Córdoba, Bussi en Tucumán), como legisladores (ej: Patti, Rico) o como en la actualidad con funcionarios en la Municipalidad de Villa María.
Manifestamos el repudio a la Ley de Merodeo por considerarla anticonstitucional, vejatoria e injusta...
Mario Leonardo Brusa
Movimiento Evita
Nota de la Redacción: esos tres párrafos estaban incluidos en un comunicado que EL DIARIO acortó, para que en la edición del 24 de marzo tuvieran cabida, expresiones (también reducidas) de APDH, UCR, Juventud Peronista, Frente Cívico, Juventud Guevarista, etcétera.
Ahora, el Movimiento Evita los envía nuevamente, acusando a nuestro medio de haberlo cortado por “falta de tolerancia”, cosa que no hizo ninguno de los otros nucleamientos.
Cabe preguntar, entonces, ¿quiénes son los intolerantes?
Otras notas de la seccion Opiniones
Escriben los lectores
Escriben los lectores
Una historia, entre tantas
Los lectores también escriben
Lamentable
|