El Ministerio de Educación y la Defensoría del Pueblo de la provincia suscribieron un convenio para procurar que en los ámbitos educativos y en la población en general, se tome conciencia “sobre la existencia, gravedad y necesidad de prevenir la trata de personas, un flagelo que implica una clara violación a los derechos humanos”, según indicó la cartera educativa.
El documento suscripto por el ministro de Educación, Walter Grahovac y el defensor del Pueblo, Mario Decara, prevé la realización de Seminarios Talleres destinados a la capacitación de educadores de todos los niveles, como asimismo una amplia campaña de difusión a través de la distribución de folletería relacionada con la problemática.
La Defensoría del Pueblo elaborará y distribuirá la documentación soporte de las actividades que se desarrollarán y se encargará de proveer los capacitadores especialistas, mientras que la cartera educativa será la responsable de determinar el lugar físico para los encuentros y de otorgar el puntaje a los maestros y profesores que concurran.
En Villa María se recorren las escuelas para hablar sobre este drama desde 2008, cuando salió la primera novela de la docente, escritoria y voluntaria Alicia Peressutti. “Entrar a los colegios fue una sugerencia de la hermana Cruz, a través de la novela. Hasta entonces no le encontrabamos la vuelta para hablar con los alumnos”, confió Peressutti a EL DIARIO.
“Es muy productivo recorrer los establecimientos educativos uno por uno, de toda la provincia. Nosotros tenemos 12 años de trabajo y estoy haciendo un curso internacional, al ser becada por la OIN, de capacitación sobre la trata. Creo que algo tenemos para decir, no solamente yo sino todo el grupo de Vínculos. Por eso, sería positivo que nos juntemos todos”, consideró la villamariense al enterarse de la decisión del Ministerio de Educación de la provincia.
“No estoy diciendo que tenemos que estar nosotros al frente de esta iniciativa, sino participar de la misma”, advirtió.
Generalmente, las charlas se dictan en los últimos tres años de la escuela de Nivel Medio. Se visitó tanto a instituciones públicas como privadas de Villa María y la zona.
“Entendimos desde Vínculos y con las Hermanas Adoratrices, que son pioneras en esto, que la tarea de prevención y concientización está en las instituciones educativas por dos razones: para que los varones no sean clientes y así cómplices de dos delitos como lo son la explotación sexual y la trata de personas, y para que las chicas no sean víctimas”.
“Luego de presentar las dos próximas novelas -el miércoles 7- y del Congreso Nacional estaremos de gira. La idea es viajar por lo menos una vez a la semana”, anunció.
Ante nuestra consulta, la referente local en la lucha contra la esclavitud de personas aseguró que en la ciudad “notamos un gran compromiso de los docentes, los trabajadores sociales y los estudiantes”.
“Todos los directivos se han comprometido”, valoró.
“Sería muy interesante que pudieramos articular con el Estado provincial para trabajar en conjunto. Hay una necesidad en ese sentido, ya que las más de 200 ONG (Organizaciones No Gubernamentales) que trabajan en esta problemática lo hacemos a pulmón, sin recursos”, expresó.
“Contamos con vídeos y las novelas. No hay ningún interés escondido, no hay afán de protagonismo. No, todos los que estamos en esto hemos vivido de cerca el drama. De hecho, muchos de los integrantes de estas organizaciones buscan a sus hijos desaparecidos”, remarcó y se emocionó hasta las lágrimas.

Curiosidad y acción

Peressutti aseguró que, en los colegios, los jóvenes formulan numerosas preguntas en torno a la trata de personas.
“Se plantean charlas de 50 minutos que terminan siendo de dos horas. Muchos nos vuelven a invitar y se identifican con las historias”, reveló.
“La única manera de combatir este delito es hablando: del drama que les significa a las víctimas, su sufrimiento, su dolor. Buscando que los varones no sean clientes, porque sin clientes no hay trata”, destacó.
Según dijo, los varones cuentan que no irían a un prostíbulo.
“Hacen muchas preguntas, son muy curiosos. Me plantean de dónde saco los nombres de las novelas, si los cambio o no, qué relación tenemos con los protagonistas, cómo funcionan las redes. Tienen preguntas concretas: ellos no van con vueltas. Hay que estar muy capacitado para hablar de trata”, subrayó.
“Si los que estaremos frente a un aula no sabemos bien de todo esto, podemos crear confusión”, manifestó.
Alicia resaltó que los alumnos de varias escuelas luego accionaron, desde su lugar, ya sea realizando cortos (vídeos), como en el caso del IPEM Vera Peñaloza, o títeres en Ucacha, u obra de teatro en Misiones.