Escribe: Camilo Rodríguez
Resulta grato ver cómo la ciudad crece en la posibilidad concreta de asegurar el principio de inmediatez en la atención a las demandas de justicia.
No son estos momentos para la mezquindad, por el contrario, debemos ser generosos y recordar las innumerables voces que, a lo largo de los años, fueron demandando un Juzgado Federal para Villa María. Todos aquellos pedidos hicieron camino para instalar la legitimidad de la necesidad que teníamos. No puede pasar esta fecha sin recordar, por ejemplo, la resolución que, a partir de un proyecto del concejal Carlos Gagliano, el 14/05/1998, votara por unanimidad el Concejo Deliberante, solicitando a la comisión de Justicia de la Cámara de Diputados de la Nación la creación del Juzgado Federal. La idea fue tomada por el diputado nacional por Córdoba Carlos Becerra, dándole estado parlamentario. Si bien muchos proyectos como aquél no llegaron a instalar el Juzgado, fueron afirmando la necesidad legítima.
Se inaugura el demandado Juzgado, las autoridades actuales tienen la posibilidad de abrir sus puertas, entre ellas hay que destacar la figura del presidente del Colegio de Abogado de Villa María, Diego Sobrino, quien fatigó por cuanto despacho oficial fuera necesario para lograr esto. Pero también trabajó con las instituciones de la ciudad y eso es muy valorable y clara muestra de que el logro es de la gente organizada en instituciones como, por ejemplo la CTA que salió a cuestionar la posible designación de un fiscal al que no se consideraba competente para el cargo.
Felicitaciones a los dirigentes actuales, a los que antes sumaron sus esfuerzos pero, sobre todo, al pueblo de Villa María que ha sido el real protagonista de esta realidad.
*Secretario General de CTA Villa María
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