Días atrás, los secretarios generales de dos de las federaciones que agrupan gremios universitarios de base, Carlos DeFeo de Conadu y Daniel Ricci de FEDUN se dispusieron a firmar la última propuesta de recomposición salarial del Gobierno nacional y la intención de acuerdo dividió aguas entre los docentes de todo el país.
"Es la misma propuesta que fue juzgada insuficiente por la gran mayoría de las universidades nacionales y que motivó el paro del 17 y 18 de marzo pasados. El problema subsiste y es real: las necesidades básicas mínimas que atienden una vida simple, pero digna, no son cubiertas por esta oferta salarial", concluyeron en asamblea los integrantes de la Unión de Docentes e Investigadores Universitarios de Villa María Udiuvima.
Para arribar a este punto, los docentes que ejercen en la Universidad nacional de Villa María, consideraron que “la inflación real acumulada del año 2009 fue del 30% y que la inflación real estimada para 2010 tiene un piso que ronda, en la más amable estimación, el orden del 25%, pudiendo alcanzar sin sorprender a nadie el 30% o 35%”.
“Es infantil proponer, sin derecho al pataleo por todo 2010, que con sólo el 11% de aumento real para este año queda cubierta esa inflación prevista. Sí, no es el 20% de aumento el propuesto por el Gobierno en el cargo testigo como dicen mal informados algunos medios, es en realidad mucho menor”, aseguran los integrantes de la entidad.
“Cuando se habla de un aumento del 20% en el cargo testigo, en realidad se están sumando los sucesivos aumentos escalonados: 9% desde abril, 6% desde julio y 3.86% desde octubre. Eso "suma", para Navidad de 2010, ese 20% ¡No es el 20% por todo el año!”, expresa el manifiesto elaborado por los asambleístas.
“En otras palabras, el aumento escalonado propuesto es algo más que un 11% mensual desde enero hasta diciembre. Ese aumento no recupera la pérdida por inflación acumulada de 2009. (No mencionemos la inflación en 2010)”, resalta en otro tramo la conclusión.
“Otro efecto implícito en el escalonamiento es que cierra la mesa de negociación hasta la última cuota. Eso es muy grave en una situación de incertidumbre inflacionaria. Si se disparan los precios los salarios quedan anclados al acuerdo firmado. Sería mucho mejor un aumento retroactivo a enero que compense la pérdida de 2009 más la inflación del primer semestre y nuevas conversaciones en otra mesa paritaria nacional para discutir el salario del segundo semestre cuando se pueda estimar la inflación con mayor certeza”, opinaron los docentes que decidieron “rechazar el ofrecimiento del Gobierno por considerarlo insuficiente”, además de profundizar las medidas de fuerza adhiriendo a las ya convocadas por otras universidades nacionales optando por la modalidad movilización y protesta.