Dos mujeres vivieron horas de angustia y tensión durante la noche del martes y la madrugada de ayer, cuando fueron sorprendidas en su casa de la zona rural de Chazón por tres asaltantes.
Todo comenzó cuando, alrededor de las 21 de la antevíspera, Mónica Bonetto, de 46 años y su hija (de quien no trascendieron el nombre ni la edad) se hallaban en su finca rural, ubicada a unos 7 kilómetros al este de la mencionada localidad y fueron abordadas por tres sujetos que llegaron hasta el lugar con fines delictivos.
Llevaban los rostros cubiertos y al menos uno de ellos portaba un arma de fuego.
Bajo amenaza, redujeron a sus indefensas víctimas, las encerraron en una de las habitaciones y las maniataron con alambre.
Los delincuentes revolvieron la casa y se llevaron dinero en efectivo, algo más de mil pesos, varias alhajas de oro y un automóvil Suzuki Vitara gris, patente ERR 957.
Luego, huyeron sin que las víctimas pudieran determinar en qué dirección lo hicieron.
Madre e hija pasaron toda la noche maniatadas y encerradas en la habitación donde las habían dejado los asaltantes hasta que, en la mañana de ayer uno de los empleados las encontró y las desató.
Entonces pudieron formular la denuncia de lo ocurrido, luego de las 9 de la mañana.
Horas después, el Suzuki Vitara gris fue encontrado, abandonado, en la localidad santafesina de Los Quirquinchos.