Este miércoles a las 20.30, el Instituto de Extensión pondrá nuevamente en marcha la Cátedra Libre. Este año los temas abordados versarán sobre “La Economía Argentina en el Bicentenario”, y en el primer encuentro disertará el licenciado Haroldo Montagu, economista del Plan Fénix.
Este espacio es auspiciado por EL DIARIO y está destinado a docentes, estudiantes, políticos, economistas y público en general.
Cabe destacar que la actividad se enmarca dentro de uno de los objetivos de la Universidad que es la de propiciar ámbitos de difusión, producción y transmisión de conocimientos, formación de una conciencia crítica y de valores de la democracia, partiendo de un debate de ideas con la finalidad de interpretar la coyuntura nacional en el marco del Bicentenario de la Revolución de Mayo.
Mediante la exposición de los temas por parte de los disertantes, se abrirá el debate o en algunos casos se trabajará con la dinámica de aula-taller.
Los encuentros se desarrollarán en la sede del Instituto de Extensión, ubicado en Santiago del Estero 1365, Villa María. Se entregarán certificados de Asistencia.
En cuanto a la posición del primer invitado de 2010, cabe mencionar que a principios de este año, publicó un artículo en el cual sostenía que "la coyuntura económica actual permite aseverar que la Argentina se encuentra con una holgada situación en sus cuentas externas. En efecto, el saldo comercial de 2009 arrojó un resultado positivo considerable (de alrededor de 16 mil millones de dólares) lo cual, a su vez, permitió concluir el año pasado con un fuerte superávit en cuenta corriente. Las perspectivas para 2010 en materia externa son, a priori, positivas. La recomposición de la demanda externa, producto de la recuperación y perspectivas de crecimiento de los socios comerciales del país, hace suponer que existirá un volumen considerable de productos y servicios exportados. Los precios de los mismos, se estima, permanecerán en los elevados niveles actuales, o inclusive, ascenderán. El resultado comercial positivo, podríamos decir, está asegurado para este año".
Sin embargo recomendó "pensar en el mediano y largo plazo", debido a que en los últimos años, y a pesar de los constantes saldos comerciales positivos, "las tasas de crecimiento de los productos que importa el país se mantuvieron muy por encima de las tasas de crecimiento de las exportaciones. Sin alterar los términos de intercambio, el saldo comercial se desvanecería en 2 ó 3 años. ¿Es posible torcer ese evitable destino y revertir la situación? Creemos que sí. El gran desafío que se presenta es modificar la estructura exportadora y, a la vez, promover una sustitución eficiente de las importaciones. Ambos requerimientos plantean grandes dificultades pero son, en definitiva, indispensables si es que se pretende mantener balanzas comerciales superavitarias y dejar atrás la restricción externa que afectó tradicionalmente a la Argentina", advierte Montagu.
"A pesar de las buenas perspectivas referidas al sector externo para el año, cabe parafrasear al filósofo romano Séneca, ya que no se podrá aprovechar el viento favorable si no se sabe hacia dónde se quiere ir".
El visitante es investigador y docente de la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad Nacional de Buenos Aires.