El deporte villamariense sigue brindando alegría a sus aficionados locales. A nivel de deportes por equipo atraviesa una etapa que no tiene antecedentes en la historia de la ciudad.
El título logrado por Ameghino en la Liga Cordobesa B de la Federación de Basquetbol de la provincia de Córdoba se suma a otros que fueron logrados en el último año por otras disciplinas por equipos, como el vóley, el rugby, el hockey y el handbol.
El proyecto del club Ameghino, que lleva dos años desde que se puso en marcha, vio coronarse en su segundo de la Liga B, luego de haber perdido la final de la edición anterior.
Este camino que pretende llegar a una Liga Nacional, encarará la Liga que viene la división A del torneo de la Federación Cordobesa, al que no participó este año por razones de presupuesto y por entender que era necesario un año más en la Liga B de la provincia.
La emoción que vivieron los dirigentes y algunos hinchas históricos del club el domingo por la noche, no tiene comparación con nada, aunque se asemeja a aquella experiencia de mediados de los ´90 en una liga nacional.
Con un plantel formado en un gran porcentaje en el club, con un grupo de refuerzos de mucho valor por lo que aportaron con su juego y experiencia, pero fundamentalmente con un bajo presupuesto.
Paso a paso, durante la fase regular, estuvo muy cerca de quedarse con el “uno”, pero fue justamente el equipo de Complejo Deportivo de Justiniano Posse el que logró la ventaja para quedarse con ese lugar y la ventaja deportiva para los play off.
En semifinales eliminó a su rival sin mayores problemas y ya en la serie final, ante el mismo equipo de Posse disputó una serie de encuentros muy parejos, jugados en un alto nivel, pero al mismo tiempo con muchos nervios.
La remontada en el resultado en los segundos finales del partido, marca el amor propio, el corazón, la garra, y hasta la serenidad para pensar en frío en los momentos calientes, de un equipo que fue madurando a lo largo del torneo con los valiosos aportes de jugadores como David Fernández, Alejandro Cicky, Luciano Caballero y otros que realizaron un festejo interminable luego de la chicharra final.

Todas las voces, todas...

Luciano Caballero: “Fue un partido increíble. Un fiel reflejo de lo que fue toda la serie. Fue palo y palo, sin sacarse diferencia, como los dos partidos de la fase regular, más el amistoso, todos definidos por dos o tres puntos de diferencia, con suplementarios, la serie no pudo ser más pareja, Estoy muy emocionado por ganar una serie que fue difícil, fue lindo jugar un campeonato de este nivel, para los dirigentes y para los jugadores que estudian y juegan al mismo tiempo, el mérito es doble. Ahora sólo queda festejar”.
“Opté por jugar una Liga B, aun teniendo posibilidades de hacerlo en la A. Sabía que podíamos ser campeones, el objetivo era muy bueno, si bien no es una Liga A, ser campeón genera la misma satisfacción en cualquier nivel, en una Liga Nacional o en otro torneo.”
Alejandro Cichy: “Es una alegría inmensa. Allá por setiembre cuando comenzamos a entrenar queríamos estar en este lugar y en este momento, se nos dio y llegamos. Por suerte es una alegría para el basquetbol local, más allá del club que dejó todo para estar acá. Esto le hace muy bien al basquetbol villamariense. Por ahí se me pasó por la cabeza que se nos escapaba, pero viendo como fueron los tres partidos anteriores pensaba que podíamos. Fueron una cosa de loco y en ningún momento imaginamos que no sería así, nunca pensamos que íbamos a sacar una diferencia. Por suerte se nos dio, ya está, el título está en casa y hay que festejar”.
Darío Arrigoni: “Como se dio el partido fue nuestra idea, que no nos sacaran diferencia. Ir manejándolo palo a palo, sabiendo que ellos al final iban a tener la presión de poder definirlo. Y bueno, ligamos… ligamos como caballos, porque el trabajo que hizo caballero durante 38 minutos y medio se ve empañado por la falta que le hacen en defensa. Se golpea y lo tengo que sacar, y pongo a Juan Giacri para que convierta los dos tiros libres y vayamos a la línea confiados para achicar la diferencia. Después ellos le hacen falta a Lástrico, empatamos el juego, David Fernández toma el rebote en ofensiva en toda la serie, y la pelota vuelve a Nahuel Córdoba, nueva falta y también convierte. Ellos atacaron y nadie se animaba a tirar, el triunfo quedó acá y el campeonato en casa, que tanto habíamos buscado.”
“Cuando hablé con EL DIARIO la semana pasada previo al tercer partido lo dije. Esta serie estaba abierta para cualquiera, que recién empezaba, que era muy pareja, que nos conocíamos mucho, quedó demostrado que en los partidos jugados en Posse y los dos en la cancha nuestra.”
“Nos da mucha motivación este logro. Con los presupuestos que se han manejado en la Liga, creo que tuvimos el cuarto o quinto presupuesto, con un plantel netamente villamariense, económico, todos jugadores de esta ciudad y esto nos da opciones de seguir trabajando con los chicos y seguir pensando en el próximo torneo que es el La Liga Cordobesa A. Pero primero quiero trabajar esta semana para acomodar las piezas, porque se me van varios jugadores a jugar a distintos clubes de la región, para ver qué me queda para jugar el torneo Interasociativo”.