Frente a la falta de respuestas ante el plateo de más personal y mejoras de las condiciones edilicias (dos de los ejes del reclamo de larga data), los trabajadores nucleados en el Sindicato de Empleados Públicos (SEP), cortaron la ruta nacional 9 frente al portal de ingreso, con quema de cubiertas y pancartas. Renovaron además el pedido para "que no se vendan las tierras en las que se encuentran servicios vitales para el Hospital, que no se destruya la cooperadora del campo que da un beneficio de 100 mil dólares anuales".
Solicitan que con urgencia se repare la "calamitosa situación de la infraestructura hospitalaria, algunas de cuyas dependencias francamente están inhabitables".
En el mismo sentido, piden "el nombramiento de personal suficiente para atender la creciente demanda de los pacientes".
"El Hospital está colapsado, sin infraestructura, sin personal suficiente, lo que hace que los internados no reciban la atención médica especializada que les corresponde", indicaron. Y agregaron que esta situación genera además presiones políticas y sindicales por lo que temen "ser involucrados en responsabilidades civiles y penales por una deficiente atención médica". Para muestra, explicaron que este fin de semana varios integrantes del plantel tuvieron que declarar por la muerte de etiología dudosa de una paciente oriunda de Villa María, que falleciera a pocos días de ser internada.
Hoy, a partir de las 9 y hasta las 14, los empleados volverán a cortar la ruta 9 en el kilómetro 608. Esperan respuestas.