El auge de la fotografía digital no hace sino crecer. Nuevos modelos acompañan al crecimiento del saber fotográfico de las personas, que pasaron de aspirar a tener una camarita para el cumpleaños del nene a querer investigar en los más lejanos territorios de la fotografía, embarcándose en búsquedas estéticas (y a veces existenciales) que sitúan al arte fotográfico como una de las disciplinas más desarrolladas de la actualidad. Consultamos a algunos vecinos sobre sus cámaras y sus experiencias con las mismas, a fin de trazar un breve muestreo sobre las herramientas empleadas por los entusiastas de la fotografía en nuestra ciudad.

Lucas: “Tuve una Canon 400D y un 70-300, pero me los robaron. Actualmente tengo la Canon 450 con un lente 18-55. Me llevo bárbaro con mi equipo. Es una cámara liviana, no me gusta llevar mucho peso. Algo destacable suyo son sus 11 puntos de enfoque. Si tuviera que aconsejarle a otro la compra de una cámara le sugeriría, si es un amateur, la 450, y si es un profesional, la Nikon D300 y la Canon 40D para arriba.”

María Rosa: “Tengo la Nikon D90, es espectacular. Con ella hasta se puede filmar en altísima calidad, pero todavía no incursioné en ese campo. Es un camarón. Si tuviera que recomendarle a alguien qué cámara comprarse, mientras que en la gama media-baja está la D90, en la gama alta están la D300 y la D700. No obstante, en el plano de la impresión, ninguna de estas difieren demasiado, se logran fotos similares con unas o con otras. A la D90 la siento plástica, funcional, versátil. Sirve tanto para hacer una foto carné como para hacer un paisaje, o algo en el estudio. La amo.”

Pablo: “Me estoy por comprar la Nikon D90. Es la más ‘pro’ a la que puedo acceder jaja. Me gusta la cámara en sí, no hay un rasgo distintivo de ella que me atraiga especialmente. O sí: el hecho de que filme. La voy a usar para trabajar en fiestas y todo eso.”

Alejandro: “Tengo la Nikon D80. Me llevo súper bien, me parece demasiada cámara para ser la primera que tengo. Por ahora cubre todas mis posibilidades. Combina precio, calidad, versatilidad, además es una cámara chica, liviana. Si bien su nivel de sensibilidad ISO hoy en día está superado por muchas cámaras nuevas, en todo lo otro no ha bajado su rendimiento. Hasta si hablamos de sensores, creo que el CCD todavía tiene más rango dinámico que el sensor CMOS, lo que la sitúa, en esta cuestión puntual, por encima de la D300, por ejemplo. Si tuviera que recomendar una buena cámara y en precio, creo que es la D90. Si no te importa el precio, tenés las D3, la D3x, la D3s, pero son para profesionales.”