La esperada Asamblea Anual Ordinaria de la Cooperativa de Obras y Servicios Públicos y Sociales Limitada, contó con la asistencia de más de medio millar de socios que de entrada manifestaron su malestar.
Los primeros encontronazos en el salón del Centro de Jubilados y Pensionados se sucedieron en el ingreso, cuando a la hora de registrarse muchos socios se presentaron factura de servicios en mano y vieron que no figuraban en el padrón, por lo que quedarían inhabilitados de emitir su voto. Allí mismo, accedieron a las boletas confeccionadas para la renovación de autoridades, pero para llegar a ese punto del temario, restaban horas de debate caliente. Además, el enojo se renovó, porque ya lo habían denunciado el mes pasado, cuando reclamaron que aún figuraban en los padrones de asociados a la Cooperativa personas fallecidas y comercios que desaparecieron hace más de 20 años.

@ Poca claridad

El abogado Richard Abrile fue nuevamente uno de los voceros de los autoconvocados, a pesar de no ser socio, pero asistió con su esposa, la médica María Isabel Vogler, titular de la factura por servicios. Abrile se encargó de cuestionar al síndico titular de la Cooperativa, Juan Carlos Bono, luego que hiciera uso de la palabra el presidente de la entidad Juan José Peretti y de la lectura de la Memoria y Balance. Propusieron que no se aprueben y se desató, ya al cierre de esta edición, un conflicto con la votación. Las autoridades y los veedores de la Asamblea no pudieron dilucidar con claridad cuántos de los asistentes habilitados a votar estaban a favor y cuántos en contra, por lo que la propuesta avanzaba hacia emitir un voto secreto.
Se reiteraron en el cruce de acusaciones que se viene dando entre autoridades y autoconvocados, una relación “poco clara” de la Cooperativa y la Municipalidad, esta vez ante la presencia del intendente Pablo Alcalino.
Todo hacía suponer que el oficialismo lograría imponer sus argumentos y los votos, avanzada la noche.