Es el mediodía y Miguel Borsatto dice al cronista: “Este debe ser el mensaje de texto número cien que recibo de comerciantes, de amigos... por lo que salió en EL DIARIO. Hasta un ministro me llamó desde Córdoba porque lo había leído en la página de ustedes por Internet...”.
Se refería a la nota aparecida en nuestra edición de ayer, en la que Roberto Kfuri revelaba que había vendido la AM local a una sociedad integrada por el propio Borsatto, Alberto Lattanzi y Jorge Lagos.
- Se lo preguntamos a Kfuri y se lo preguntamos a usted, ¿qué va a pasar con el personal?
- “Sigue toda la gente. El comportamiento de todo el personal ha sido positivo, con compromiso. Así las cosas, no se va nadie.”
- ¿Quién es Jorge Lagos? Se lo pregunto porque se sospecha que es “la pata política”.
- “Jorge Lagos es el propietario de una cadena de concesionarias que se llama COR-CAM. Ahora mismo está en Alemania, en la planta de Wolskwagen, invitado para conocer los camiones que dentro de algún tiempo llegarán al país. Me parece que no debe haber ni un solo político que pueda darle más de lo que tiene...”
- ¿Cómo se armó la sociedad con usted y Lattanzi?
- “Lattanzi es contador de algunas empresas que han tenido trato comercial con Lagos. Entablaron una relación que no sé si es de amistad, pero sí de respeto. Como no nos alcanzaba la plata para comprar la radio, lo invitamos a participar. Nos ayudaba que Kfuri prefería que la radio quedara en manos conocidas, de la ciudad. Así se armó todo. No digo que nos hizo un favor, pero aceptó... Lógicamente que es un hombre de negocios y no quiere perder ni un centavo.”
- ¿Cómo es la radio que se viene?
- “Una radio abierta, pluralista, donde tengan cabida todas las expresiones culturales, sociales, políticas, empresarias. Por las características técnicas que tenemos, con una antena que nos permite un alcance de 300 kilómetros, queremos ser quienes lleven la voz de esta ciudad a todas las demás. Queremos ser una herramienta útil para que la gente transmita lo que le pasa. Y dentro de este marco general, queremos rescatar el potencial de cada uno de los trabajadores, para que se desarrolle en el lugar adecuado para el bien del proyecto.”
- ¿A qué atribuye tantas versiones tan diferentes antes y después de la venta de la radio?
- “Una sociedad politizada como la de Villa María hasta tiene derecho a la suspicacia. Son naturales las especulaciones. Pero ya lo dije, la radio va a tener el micrófono abierto a todas las expresiones y nuestro pluralismo acallará rumores.”
- ¿Sigue en el estado que comentó brevemente en nuestra edición de ayer o la cosa se va aplacando?
- “Tengo una alegre conmoción. Me está pasando la vida por dentro. Ver salir a Kfuri de la radio después de 38 años y saber que ya no vuelve mañana, es muy fuerte. Sé que iré digiriendo el alto impacto emotivo, es más, creo que lo voy asimilando a partir del compromiso con el trabajo y las ganas de honrar a los que me aceptaron como socio.”