El viernes por la noche se realizó en el auditorio del Conservatorio Superior de Música Felipe Boero el denominado "Concierto del Bicentenario".
Munido de la selección de piezas folclóricas, de música ciudadana y partituras de danzas de antaño, un grupo de profesores ejecutó diversos instrumentos para una decena de obras escritas por referentes emblemáticos de las esferas académica y popular.
En primer lugar, Germán Ruiz interpretó al piano "Triste Nº 4 y 5" de Julián Aguirre y el tango "A don Agustín Bardi" de Salgán. Luego, acompañado por Virginia Rivarola en flauta, socializó "Rosita Iglesias" (de la obra "Las presencias") de Carlos Guastavino. Por su parte, Alejandra Acevedo ofreció dos piezas más que aplaudidas de Atahualpa Yupanqui en guitarra, el gato "El tulumbano" y la chacarera "La nadita". Rivarola volvió al escenario junto a la pianista Mónica García para hilvanar un set tanguero con "El choclo" de Villoldo, "Mi Buenos querido" de Gardel y "Revirado" de Piazzolla. García, luego regalaría la suite "Pequeña danza" del ballet "La estancia" de Ginastera, para finalizar el programa junto a Ruiz y a dos pianos con "Bailecito" de Guastavino y el "Gato" de Aguirre.