Pares de manos rojas al final del partido. Eso mostraron los hinchas de Rivadavia de tanto aplaudir a Martín Erregarena a lo largo de los 90 minutos. Y no era para menos.
Porque el “Vasco” fue mucho más que los tres goles, como si esto fuera poco.
La potencia que mostró en cada participación hizo que descalibrara a la defensa de Argentino y pese a jugar con otro lungo como Damiano, quedó demostrado que ambos pueden actuar juntos perfectamente, porque no se chocaron en ningún momento.
En el olvido quedaron esos encontronazos previo al comienzo del torneo, cuando “Vasco” quiso cambiar de aire, algo que los dirigentes del “verde”, con mucho acierto, por supuesto, no les pareció ideal y lograron retenerlo.
El tiempo le dio la razón y el domingo todos felicitaron al delantero, al goleador, al “Vasco”, el principal causante del presente del elenco cabralense que en las últimas fechas dejó de lado los interrogantes sobre su funcionamiento con dos triunfos vitales para sus aspiraciones.
“Estamos en la punta y eso es lo más importante”, señaló el héroe de la tarde del domingo apenas terminado el cotejo.
“Los goles solamente muestran que jugamos bien y que creamos las chances necesarias para ganar”, dijo con modestia, tal vez minimizando su brillante actuación y destacar la labor de todos.
Por eso, sin dejar de resaltar la solidaridad del conjunto, aseguró que “estoy orgulloso de este equipo, que metió hasta el final. Ustedes vieron cómo pusieron mis compañeros en todo el campo, lo que permite que uno tenga opciones de gol”.
A la hora de hablar de las mejoras en Rivadavia, explicó que “ahora las pelotas me llegan claras para que yo pueda definir. Antes los centros llegaban mal, pero gracias al trabajo de la semana, hemos mejorado mucho”.
“Ahora estamos jugando muy firmes atrás y tenemos la suerte de poder convertir lo que generamos en ofensiva” opinó sobre cómo está parado el nuevo líder en la cancha.
Y rápidamente se fue a festejar con compañeros e hinchas que lo esperaban en el playón de la cancha. Había terminado su tarde perfecta.