En tiempos donde la violencia se agranda y las rivalidades suelen ser mal entendidas, el fútbol doméstico volvió ayer a dar una muestra de compromiso y apoyo.
Antes de iniciarse los encuentros, los equipos posaron para los fotógrafos con banderas y remeras (en el caso de Argentino) que decían: “Fuerza Lucas”.
El apoyo unánime fue hacia Lucas Morre, el jugador de Colón que atraviesa un difícil momento tras el accidente automovilístico que, días atrás, le costó la vida a su mujer, Noelia Cladera, y le provocó heridas a su nena de tres años, en un hecho trágico que causó la muerte de una joven villamariense.
Por este motivo, la jornada futbolística que se desarrolló ayer se había suspendido el pasado fin de semana, dejando en duelo a toda la comunidad del fútbol local.
Morre, pese al mal momento, quiso retribuir el apoyo que le dieron en estos días y asistió a la cancha de Colón para ver el partido que ayer jugaron el local y Rivadavia.
El volante tiopujiense recibió nuevamente el ánimo de los futboleros locales (como en la foto de la izquierda) y se enteró también que, en otras canchas de la liga, los demás jugadores le dieron fuerzas para seguir.