Escribe: "Pepo" Garay
(enviado especial de El Diario, desde Johannesburgo)

Ahora es cuando, después de una larga espera, el Mundial está otra vez entre nosotros. Lo estuvimos anhelando desde hace tiempo. Y más aún los dueños de casa. Impacientes y esperanzados, los sudafricanos viven con la mayor expectativa el inicio de ésta, su Copa. Algún día les iba a tocar. Y ese día está a la vuelta de la esquina. A tan sólo una jornada del inicio del XIX Campeonato Mundial de Fútbol, Africa toda celebra el acontecimiento.
Tal como en Alemania hace cuatro años, EL DIARIO dice presente, esta vez en cobertura conjunta desde Sudáfrica con los demás integrantes de la Asociación de Diarios y Comunicadores Cooperativos de la República Argentina (Adiccra). Día a día le llevaremos a los habitantes de Villa María, la región y el país, todo el color del evento más popular del planeta. Para vivir el Mundial desde adentro.

Enciendan los motores

Lo cierto es que los anfitriones parecen tener la casa en orden para mañana, cuando el torneo comience oficialmente. Consultado por este medio, Rich Mkhondo, jefe de la Oficina de Comunicaciones del Comité Organizador de Sudáfrica 2010, sostuvo: “Nosotros les prometemos una cosa: que este Mundial va a ser diferente. Las experiencias que van a tener los hinchas van a ser tan distintas como lo fueron aquellas del Mundial de Alemania respecto a las de Corea -Japón. La única constante va a ser que todos los fanáticos van a poder disfrutar de un ambiente seguro para compartir con los demás amantes del fútbol”.
Según Mkhondo, “todo está listo” para el inicio del Mundial, a partir de un trabajo intenso que el Comité vino desarrollando en estos últimos años. “Desde el Comité hemos trabajado codo a codo con las demás partes interesadas para resolver cada detalle del torneo. Desde aspectos de infraestructura, como estadios y rutas, hasta aspectos sociales, como la seguridad. Todo está bajo control”, aseguró.
Para los organizadores, la puesta a punto significó una verdadera carrera contra el reloj, teniendo en cuenta que la FIFA amenazó en repetidas ocasiones con quitarles la sede si no se apresuraban con las obras prometidas. Esas dudas y resquemores parecen haber quedado atrás y hoy Gobierno, Comité y sociedad sudafricana en general aguardan el inicio del torneo con una ansiedad incontrolable. “No vemos la hora de que empiece. Estamos muy contentos de recibir al mundo y sobre todo a tantos argentinos. Esperemos que todos se sientan como en casa” se ilusionó Yolanda Jordaan, una de las encargadas del Campus de la Universidad de Pretoria, donde desde el pasado 30 de mayo se aloja la selección nacional.
Mientras tanto, las calles de Johannesburgo ya tienen esa fisonomía de mundial que tan bien le sienta. La capital financiera del continente arde con la llegada de los hinchas de todo el mundo, que de a poco se disponen a disfrutar de la fiesta del fútbol.
Que así sea.