Cuando el mediocampista Leonardo López detectó que sufría hepatitis y no pudo seguir en Alumni, había que buscar un remplazante para no padecer el descenso en el desenlace del torneo.
El equipo se fue a la Promoción y la dirigencia debió apelar al refuerzo que necesitaba. Entones surgió el nombre de Sebastián Coria, volante ofensivo de Maipú de Mendoza, que amagó con venir (por la buena relación que mantiene con el técnico Carlos Ranalli) y al final no vino. Sin embargo, la opción fue más que positiva: Alumni logró repatriar al mediocampista César Ariel Quiroga, quien había dejado una buena impresión antes de retornar a su club, Juventud Unida de San Luis.
El “Bujía”, con su experiencia y su talento, resultó ser un acierto porque, en definitiva, su presencia era una garantía para los dos encuentros de la reválida, ante Unión de Villa Krause.
Así, tal como se preveía, Quiroga la rompió. Hizo un gran partido en San Juan, donde Alumni debió marcar presencia en el medio, recuperar y tener la pelota. Y también cumplió un buen papel en la revancha, el domingo, en Plaza Ocampo, tanto sea para distribuir, presionar o limpiar la jugada.
Con los resultados puestos, Alumni terminó saboreando esta efímera, pero efectiva participación del puntano.
“Se logró por lo que se venía trabajando hace un mes y medio atrás y fue digno ganarlo porque hicimos bien las cosas, estuvimos bien concentrados los dos partidos y creo que si a lo largo del campeonato hubiese estado así, Alumni se salvaba antes”, recalcó Quiroga después del 3 a 0 sobre los cuyanos.
“Concentración, mucha actitud y hambre” fue, para Quiroga, la clave de la permanencia de Alumni tras los encuentros de la Promoción.
“Había que meterse en la cabeza que era un equipo ganador y creo que por eso ganamos; por ahí si no te ves ganador te pasan por arriba y si es contrario, ganás siempre, no importa qué rival está enfrente”, argumentó.
Aplaudido por todos los hinchas, que también corearon su nombre, Quiroga se sintió como en su casa. No obstante, trató de poner paños fríos en cuanto al entusiasmo porque no será fácil mantenerlo en el plantel.
“Yo vine por estos dos partidos y habrá que sentarse a charlar y ver qué pasará de ahora en adelante; por ahora sólo quiero festejar y escuchar la oferta para ver qué decisión tomo”, comentó.
El pase del jugador pertenece a Juventud de San Luis, donde el empresario Ahumada tomó la posta en la conducción del fútbol de la entidad. Y se sabe que el “mexicano” (ex gerenciador de Talleres) maneja un alto presupuesto para armar el próximo plantel. Entonces, si Quiroga es de sumo interés para la “Juve”, será difícil que Alumni lo pueda mantener. El tema está por verse.