Escribe: "Pepo" Garay, desde Johannesburgo
(enviado especial de EL DIARIO y Adiccra)

Argentina siempre fue favorita. Luego de aquella épica noche montevideana, con pasaje al Mundial en el último partido de eliminatorias, los sudafricanos postularon a la selección como firme candidato a llevarse la Copa. Aunque claro, el contexto de esa sufrida y cuestionada clasificación todavía engendraba dudas.
Ahora, con los de Maradona líderes en su grupo y mostrando un desempeño ofensivo acaso insólito en este campeonato, la balanza local se ha inclinado completamente. Sudáfrica habla de Argentina. Habla mucho. Habla bien. “Argentina está teniendo una gran actuación. Se llevan la Copa seguro”, pronostica Lyno, 22 años, profesor de ecuación física. “No creo que los puedan parar. Sin dudas son mis candidatos número uno para ganar el titulo”, asegura Kenneth, 28, músico y sonidista. “Ustedes van a ser los campeones. ¿Viste como juega Argentina? Es lo mejor de la Copa”, subraya Duncan, 39, guardia de seguridad.
Son sólo algunos ejemplos. Pero sirven para reflejar la coyuntura. Hoy, para los locales, apostar por Argentina es apostar a la banca. Las flojas actuaciones de los tres máximos candidatos del pueblo africano en la previa (Brasil, España e Inglaterra) favorecen la tendencia. Más aun la casi inminente eliminación de los dueños de casa.
Pero así como por estas horas la selección es galardonada hasta el hartazgo, todo podría cambiar ante un mínimo traspié frente a Grecia. Con una opinión pública decididamente fluctuante en materia de fútbol, no seria de extrañar. Ya les pasó a los alemanes, que tras su contundente debut 4-0 ante Australia, fueron objeto de laureles y pronósticos de gloria. La caída ante Serbia en la segunda fecha los hizo retornar a su lugar de origen en las encuestas.
Amén de ese peligroso exitismo, Argentina tiene a su favor la simpatía que, es cierto, los sudafricanos le demostraron desde un principio. Como que sólo les hacía falta una muestra de contundencia. Ahora que la tienen, la confianza se acrecienta.
“Arrrgentina, Arrrgentina”, siguen diciendo los habitantes de Johannesburgo cada vez que divisan una camiseta albiceleste. Tras los partidos ante Nigeria y Corea, esa marcada pronunciación de la “R” se acrecienta aún más. A los clásicos “Arrrgentina Maradona” o “Arrrgentina Messi”, se le suman los “Arrrgentina campeón” o “Vamos Arrrgentina”. La temperatura que marca el termómetro de la calle es incuestionable.
A su vez, la prensa local se llena la boca con el juego del 10 del Barcelona, el despliegue de Tévez y los goles de Higuaín. Pero poco se dice de los errores defensivos y los desacoples entre los volantes y la última línea. Los medios le dan a la gente lo que la gente quiere escuchar.
Eso sí: para los sudafricanos, el máximo favorito sigue siendo Brasil. “Su” Brasil.
De todas formas, ante el buen arranque de los nuestros, las distancias parecen haberse acortado.