Norberto “Titi” Dellasantina nos relató el calvario que le tocó vivir el pasado sábado al mediodía cuando regresaba de Villa María y lo detuvo la Policía Caminera.
“En Villa María compró un colectivo en desuso y llevó un compresor para acondicionarlo y poder traerlo a tiro. Ahí cometo la desprolijidad de traerlo a tiro con mi camión de auxilio. El sábado al mediodía estaba en viaje, me para la Policía Caminera y me hace un acta de infracción por conducción peligrosa; ya que aparentemente no se puede remolcar nada”, refirió Dellasantina.
Luego prosiguió su relato: “Venía por la autopista, ya que había pasado la rotonda de Villa María y, si bien el camión no tenía luces, mi hijo venía atrás con la camioneta con las balizas”.
“En momentos en que tomo el puente para empalmar y volver por el camino que tenía planeado, me para la Caminera y comenzó el calvario”, agregó el hombre.
“Eran aproximadamente las 12.50, era el mediodía. La Caminera me dice que me iba a hacer un acta de infracción por conducción peligrosa y me lleva a un depósito policial y me hacen dejar el colectivo y el camión; mientras que me llevan a la Comisaría de Villa María donde me toman los datos y me dicen que me iban a trasladar a Arroyo Cabral porque estaban desinfectando la Comisaría de Villa María”, prosiguió Dellasantina.
“Me trasladan a Arroyo Cabral -continuó- y ahí me dicen que me iban a detener. Comienzan a indagarme, me revisa el médico policial y me hacen desvestir completo como si fuera un delincuente. Me hacen el chequeo, me retiran las pertenencias y me meten en el calabozo. Recién me liberaron a eso de las siete de la tarde.”
En su última reflexión, el denunciante apuntó: “Otra de las cosas que me llamó la atención fue que en ningún momento me pidieron el carné de conducir, DNI, ni documentación, sino que me hicieron el acta policial sólo con los datos que yo mencioné”.