Con tres refuerzos confirmados, un jugador en evaluación y un grupo conocido, el plantel de Alumni comenzó ayer la marcha rumbo a la próxima temporada del Argentino A, donde el objetivo será mejorar y no sufrir como se sufrió en estos últimos tiempos.
Eduardo “Tato” Bassi, quien asumió como preparador físico, fue quien llevó a cabo la mayor parte del trabajo de la víspera, ante algunas caras conocidas y otras nuevas.
Por caso, de arranque nomás, se sumaron el mediocampista central Eduardo Wonner, el volante Orlando Porra y el lateral villamariense Esteban Canelo, quien proviene de Belgrano y, como los otros dos, integrará el plantel para la próxima temporada, según afirmó el entrenador Carlos Ranalli.
Además, se sumó el defensor villamariense Fernando Maldonado, quien proviene de las inferiores de Newell’s y está en período de evaluación.
“Canelo va a integrar el plantel; a Maldonado lo voy a evaluar porque, particularmente, me dieron buenas referencias, pero no lo conozco”, afirmó el técnico de Alumni, que afrontará por primera vez una pretemporada y elegirá a sus jugadores.
Por lo pronto, ayer entrenó nuevamente el lateral Diego Villagra, quien volvió de Instituto y podría retornar al equipo fortinero. Además, estuvieron otros jugadores del club como los arqueros Carlos Ronco y Guillermo Mascambroni, los mediocampistas Sebastián Godoy, Matías Bolatti y Juan Aimar; los defensores Nahuel Caler, Alexis Díaz, Leandro Peñaloza, Rafael Echeverría y Ezequiel Morcillo; y los delanteros Román Strada y Federico Depetris.
Mientras, Ranalli dijo que espera por cinco o seis refuerzos importantes, “un central, otro volante central, un carrilero derecho y, por lo menos, tres delanteros”.
Nombres no suenan, ya que la idea es mantener todo en reserva para que “no los soplen” de otros clubes.
En tanto, el DT fue claro en un concepto: “No vendrá ningún jugador que yo no haya contactado o no recomiende. El día que venga un jugador que yo no traiga, me voy atrás de ese jugador. Eso no se negocia bajo ningún punto de vista”, aseguró.
En cuanto a los dos volantes experimentados que llegaron, Ranalli dijo que convenció a Wonner. “Lo hablé hace tres días para que se sumara y ya tiene todo arreglado”. Y en cuanto a Porra, comentó: “Jugó en Cipolletti dentro de un nivel muy alto en el primer torneo de la temporada”.
“No es fácil acertar y elegir los refuerzos”, reconoció Ranalli, para luego agregar: “No es fácil el armado de los equipos y que la dirigencia enseguida dé el nombre de los refuerzos, pero la idea en el trabajo es armar un equipo como terminó, que juegue presionando, que sea agresivo, que busque siempre el arco de enfrente y que no espere, sino que tenga protagonismo, como lo tuvimos en los últimos partidos”.
De todas maneras, el mayor objetivo del técnico y de todo Alumni es no volver a sufrir.
“Vivir el tema de jugar una Promoción es desgastante, horrible, pero hemos convivido más de 50 días, conformamos bien el grupo, hicimos una puesta a punto y creo que se mostraron ganadores, a pesar que enfrentamos a un gran equipo y, por suerte, se pudo mantener la plaza, que era el objetivo”, afirmó.
Más tarde comentó: “Cuando tomé el equipo estábamos en descenso directo, entonces sabíamos que estaba dentro de las posibilidades jugar lo que jugamos. Lo que pasa que sacamos muchos puntos, pero los equipos que peleaban contra nosotros también lo hicieron, entonces pasó lo que pasó. Son experiencias vividas, por suerte salió bien y ahora trataremos que eso no se repita porque si estás tres o cuatro temporadas seguidas peleando por lo mismo, en algún momento te va a tocar”.

Bassi

El “Tato” Bassi, quien viene de trabajar en Alem, es un profesional local que lleva años dentro del fútbol y cuenta con una dilatada trayectoria. No obstante, su retorno como preparador físico a la entidad villamariense fue una sorpresa, teniendo en cuenta que más allá de los villamarienses Gustavo D’ambrossio (con Rubén Agüero) y Paulo Garletti (con Marcelo Bonetto), muchos técnicos y “profes” eran foráneos.
Al respecto, Ranalli dijo que conoce a Bassi “desde hace muchos años, desde Rosario; hicimos muchas giras por Europa y México, cuando yo trabajaba en Renato Cesarini”. Además, recalcó que “la idea también es poder dejar en el club y la ciudad alguna persona bien posicionada, con trabajo, además de formar gente local”.
“(Pablo) Salas, gracias a Dios pudo mejorar, le salió la oportunidad de trabajar en la B Nacional y me pone muy contento; estaba también la posibilidad de tener a Paulo Garletti, que también se fue a San Juan, y busqué el profe de Gorosito, que se vuelve a España, pero cuando salió lo de Bassi enseguida me puse de acuerdo; el tema económico se arregló con la dirigencia y bueno, ahora hay que trabajar”, añadió el técnico, en el primer día de laburo dentro de la nueva etapa de Alumni.

LAS FOTOS:
1- Volante. Orlando Porra viene de Cipolletti de Río Negro y Ranalli espera mucho de él

2- Lateral. Esteban Canelo es un villamariense que estuvo en las inferiores de Belgrano y tiene el visto bueno del DT

3- En análisis. El villamariense Fernando Maldonado, surgido de Unión Central, viene de Newell’s

4- Profe. El “Tato” Bassi volvió a Alumni, donde supo trabajar con Peñaloza y otros técnicos, años atrás