El titular del Deliberante Javier Suppo tiró el guante en la cara del radicalismo, durante el acto en memoria de Juan Domingo Perón, desafiándolos con los errores del pasado. Los seguidores de Yrigoyen y Sabattini no perdieron tiempo en aceptar el reto y agitaron la actuación del peronismo en la década pasada.
En un escrito, enviado a nuestra Redacción, Felipe Botta (foto) y su equipo puso énfasis en el “hostigamiento” que sufren hoy “los que piensan distinto” al oficialismo, destacando que “no supieron leer el mensaje que la gente dejó en las urnas el pasado 28 de junio de 2009”.
“En los últimos días, con mayor intensidad, Accastello y sus seguidores no perdieron oportunidad para, como se dice vulgarmente, ‘tirar palos’ contra aquellos que han osado expresar su opinión sobre algunos temas de actualidad. Pero ya llegó el colmo...”, precisó el documento haciendo referencia al discurso de Suppo en el cementerio La Piedad, el primer día de julio.
“Parece que algunos en sus ambiciones de poder o de obsecuencia, anteponen el temperamento por encima de las instituciones y de la ley (Art. 38 de la Constitución Nacional y Ley Orgánica de los Partidos Políticos Nº 23.298).
Estamos en democracia, esto significa que debemos respetar las instituciones y sus distintos actores y trabajar por la integración social.”
El mensaje radical, expuso, en otros de sus párrafos, la intolerancia existente en el país “que se agudiza cada vez más” y de la mano de los que “tienen responsabilidades de Gobierno”.
“La actividad de los comités es justamente la elaboración de proyectos de mediano y largo plazo para contribuir al desarrollo de la sociedad y disminuir las desigualdades. Pero seguramente algunos no lo entiendan porque, por ejemplo, este comité no forma parte del protocolo oficial del municipio de Villa María.”
Seguidamente, los referentes de la UCR abordaron el punto álgido de las acusaciones que en forma constante les “tira el peronismo”.
“Se nos pretende acusar de todos los problemas del pasado, por supuesto que hemos cometido errores, los discutimos, asumimos el costo político y los hemos superado. Nuestro partido tiene más de cien años de historia, y sigue más vigente que nunca porque los aciertos fueron mayores que los errores.”

“Hablemos de historia”

“Pero si quieren hablar de historia, tampoco nos vamos a negar, podríamos comenzar en épocas remotas como ser el rol que cumplió el capitán Juan Domingo Perón en el golpe de Estado contra el Gobierno democrático de Hipólito Yrigoyen, pasando por sus aciertos y desaciertos en su larga carrera política.”
Seguidamente, pusieron el dedo en la llaga en épocas más recientes. “Los accastellistas en sus alocuciones públicas omiten una parte de la historia, para no asumir la responsabilidad que su partido tuvo en la nefasta década de los ‘90 (¿o acaso en ese momento no eran todos menemistas ?) en la destrucción del aparato productivo del país”.
Seguidamente, recordaron la responsabilidad del peronismo en “las privatizaciones de los sectores estratégicos, en el 18 % de desocupación, en el deterioro de la educación y la salud pública como así también el incremento de la inseguridad a causa de la marginalidad y de las desigualdades, ese fue el contexto nacional en el que le tocó al radicalismo gobernar la ciudad”.
El comunicado siguió manifestando: “Preferimos tomar el ejemplo de aquel Perón de los últimos tiempos de su vida que entendió la importancia del consenso, del respeto por los partidos políticos y del diálogo político; pero que a pesar de su esfuerzo no pudo evitar el daño producido tras largos años de divisiones e intolerancia que dio la excusa para la instauración de una dictadura sangrienta que sólo dejó perdedores”.
“Creemos que debemos dejar la historia a los historiadores para no caer, como algunos, en la tentación de interpretarla según la conveniencia. Los que tenemos responsabilidades como partido político tenemos la obligación de pensar en el futuro, en una sociedad en el mediano y largo plazo, en donde el valor de la ética y la política vayan de la mano, en donde la política y sus dirigentes no estén sospechados, y en donde el autoritarismo y el caudillismo no sea el modelo del político del futuro.”