Escribe: Jesús Chirino
Los nombres de las calles, parques, paseos y demás espacios públicos de la ciudad no sólo son útiles para organizar el espacio urbano de manera tal que resulte relativamente fácil ubicar las residencias de quienes viven en el lugar. Las designaciones de los lugares también pueden ser vistas como una suerte de macrotexto que permite asomarnos a distintas visiones de la sociedad y su historia sostenida por los sectores con acceso al poder en distintas generaciones a lo largo de los años. Recordamos aquí algunos de los nombres asignados a calles de la ciudad en el período de gobierno en que ejerció la Intendencia el médico Carlos Pizzorno y Rogelio Sánchez fue presidente del Honorable Concejo Deliberante de la ciudad.
@Las Naciones Unidas
El período de Gobierno de Pizzorno se inició el 25 de mayo de 1973. Tres meses después, el 22 de agosto, el Consejo Deliberante sancionó la ordenanza 1.409, promulgada el mismo día por el intendente municipal, mediante decreto 60 “A”. El primer artículo de aquella norma dice “Desígnase con el nombre de “Avenida de las Naciones Unidas” a la actual calle San Juan, en el tramo comprendido entre la Av. Costanera y Bv. Italia”. En el artículo segundo se estipula que la Dirección de Obras Pública será la encargada de “…la confección de un proyecto de ornamentación de dicha avenida, incorporando en la misma elementos que coincidan con el espíritu de la presente ordenanza”. Así fue redactada la norma que impuso el nombre a la avenida que culmina en el monumento al general Martín Miguel de Güemes.
@Un general y caudillos
Para julio, el día 25, de ese mismo año el Honorable Consejo Deliberante, presidido por Rogelio Sánchez, impuso el nombre de “general Juan José Valle, a la calle de esta ciudad que partiendo del puente P. J. B. Alberdi, llega en su extremo norte a calle San Luis”. La designación se realizó mediante la ordenanza 1.401, promulgada por decreto 53 “A”. De esa manera un gobierno que había surgido de la voluntad de los ciudadanos, expresa en el acto democrático de las elecciones de marzo de 1973, decidió rendirle homenaje a quien junto al general Raúl Tanco, lideró la insurrección del 9 de junio de 1956 contra aquellos que habían derrocado al Gobierno argentino por la fuerza. Con el tiempo los vientos políticos cambiaron y el 24 de Marzo se inició la dictadura más sangrienta de la historia nacional. Los representantes locales de ese Gobierno dictatorial, que ejercían el poder en la ciudad, quizás porque servían a militares de una estirpe muy diferente a la de Valle, le sacaron el nombre a la calle. Nunca fue repuesta la designación de esa arteria.
También en aquel 1973, mediante la ordenanza municipal Nº 1.428, del 24 de octubre, se impuso el “nombre de Caudillos Federales a la calle que partiendo desde el frente del Mercado de Abasto Municipal se proyecta hacia el norte hasta la ruta 9”. La promulgación de dicha norma se realizó mediante el decreto 82 “A”, fechado el 29 de octubre con la firma de David Enrique Gancedo, en su calidad de secretario General del municipio y del intendente Pizzorno.
@Rucci
Ese mismo 24 de octubre también fue sancionada la ordenanza 1.429, cuyo primer artículo señala: “Impónese el nombre de José Ignacio Rucci a la actual calle Brasil. El sindicalista Rucci, representante de lo que se ha dado en llamar burocracia sindical, había caído muerto en medio de una balacera el 25 de setiembre de 1973. Este gremialista, de la corriente ortodoxa peronista tributaria del vandorismo, se encontraba en antípodas del sindicalismo clasista que lideraba Agustín Tosco, quien en 1972 le había dicho al diario local “Opinión”: “Rucci es un gorila”.
En la misma ordenanza que se impuso el nombre de Rucci a una calle de la ciudad se designó “…con el nombre de Brasil a la actual calle entre las, Gral. Paz y José Ingenieros y que se proyecta de este a oeste desde calle Deán Funes hasta la Gral. Deheza”.
@Educadores
Días después, el 31 de octubre de 1973, se dictó la ordenanza 1.432 promulgada por decreto Nº 85 “A” del 5 de noviembre. Estas normas establecieron que la calle “…comprendida entre... Santiago del Estero y San Luis, que nace en Bv. Ramón J. Cárcano y termina en la calle Bernardino Rivadavia cruzando la Gral., Juan J. Valle” fuera designada con el nombre Profesor Juan Rocchi, educador italiano que dedicara sus esfuerzos a la obra educacional, que habiendo sido iniciada por Juan Dall´Ora está cumpliendo cien años de existencia en la ciudad.
La memoria de otro educador local había sido honrada aquel mismo año cuando el 13 de junio de 1973 el Honorable Concejo Deliberante dictó la ordenanza 1.395 mediante la cual, a causa de una presentación realizada por la “Fundación Cultural Dr. Antonio Sobral” y la Comisión de Homenaje, fue designada con el nombre de “Dr. Antonio Sobral” a la calle que anteriormente era conocida como “Santiago Balerdi”. La misma ordenanza establecía que la mencionada Fundación Cultural y la Biblioteca Bernardino Rivadavia quedaban a cargo del acto de imposición de nombre que se realizaría el 25 de setiembre. La norma legal también estableció que fuera nombrada como “Santiago Balerdi” a la “calle que nace en la Elpidio González y que se prolonga hacia el norte hasta la 1º de Mayo”.
En los letreros de las calles aún figuran algunos de aquellos nombres impuestos; otros, como dijimos, han sido borrados por gobernantes posteriores. Más allá de las coincidencias o desacuerdos con las figuras homenajeadas con los nombres de las calles es indudable que forman parte de esa identidad, siempre en construcción, de nuestra ciudad.
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