Tras analizar las 500 páginas donde Innviron detalla el proyecto de gasificación der esidios que procura realizar en Villa María, Toledo y Río Cuarto, EcoSitio emitió un informe en el que da cuenta de la falta de información que contiene.
Luis Tuninetti, presidente de la entidad ambientalista, presentó ayer ese informe para que el intendente Eduardo Accastello tenga conocimiento de la opinión de los ambientalistas.
Entre las objeciones presentadas, está el de la falta de certificaciones que acrediten los antecedentes de Innviron en materia de tratamiento de la basura a través de gasificación. También cuestiona que no hay especificaciones precisas sobre áreas afectadas o emisiones de tóxicos, entre otros.
“El proyecto parece orientado en principio al área de Villa María solamente y no tiene en cuenta que sus requerimientos implican estaciones de transferencia en diversos puntos con el fin de trasladar la basura”, indica Tuninetti en la nota. Es decir, que no se habla de traer la basura de las ciudades de la región a Villa María, como acordaron con el Eninder, entre ellas, Villa Nueva (ver página 9). “Sobre el Monitoreo de Emisiones, en la página 38, Innviron establece que sus cálculos están basados sobre dos plantas emplazadas en China e Irlanda (“Sobre la base de datos de las emisiones a partir de gasificadores de 10 MW en funcionamiento de Anji County, República Popular China, y en Irlanda”). Al respecto no se encontró ninguna referencia de Innviron en los proyectos, sólo se pudo determinar que la de Anji County está en construcción”, expresó el ambientalista en la nota elevada ayer a Accastello.
Cuestiona que en lo que hace a legislación sobre emisiones, se basa en la norteamericana y “nada dice de la aplicación de la Ley 8167 de preservación del estado normal del aire”.
Considera que establecer como área de influencia 1.500 metros tomando como centro la chimenea -tal como indican en el Aviso de Proyecto- es, al menos, limitado, porque “teniendo en cuenta la magnitud del proyecto que pretende trasladar los residuos desde decenas de kilómetros; estimamos que el área real debe ser mucho mayor a la expresada”.
Pide EcoSitio que se amplíen datos sobre superficie cubierta, población afectada, etapas del proyecto, consumo de energía en cada etapa, cantidad de personal a ocupar en cada etapa, relación con planes estatales o privados y principales organismos involucrados.
Algo que puede ser anecdótico, pero que EcoSitio pidió aclaración: se trata de la referencia a una cooperativa “9 de Julio”. Los ambientalistas estiman que Innviron quiso decir “7 de Febrero”, que es la cooperativa de recicladoras de residuos, pero igual, piden que se especifique.
“En el punto 21 (Ensayos, Determinaciones, Estudios de Campo) sólo se adjunta el EsIA efectuado por la empresa EMRE. Estimamos que no es válido teniendo en cuenta que se trata de un estudio realizado hace varios años y que sólo se refiere a una de las partes (vertedero controlado) del Aviso de Proyecto”, agregan.
En la última consideración -en esta nota mencionamos sólo algunas- cuestionan que el Anexo 4 se encuentra en inglés cuando “claramente en el Anexo III del Decreto Reglamentario 2131 de la Ley 7343 establece que “la información solicitada deberá ser presentada en el idioma oficial de la República Argentina.”
Por todo ello, solicitan al Poder Ejecutivo que les presente la certificación oficial que presentó oportunamente Innviron para acreditar su experiencia. “En base a todo lo expuesto, es que nuestra institución considera que debe ser replanteado el Aviso de Proyecto en muchos de sus puntos con el fin de que la autoridad de aplicación pueda evaluar correctamente el emprendimiento”, concluye.