Jonathan Colrat sabe lo que es querer reunirse para pedir entre todos mejoras en el trabajo. Así lo intentó como empleado de Walmart Córdoba y fue despedido. Ahora, espera la resolución de un amparo de la Justicia porque sabe que el motivo de su telegrama era querer hacer una elección de delegados.
Gustavo Ruiz, está suspendido. También fue elegido como delegado de hecho, dado que el gremio se negó a convocar a una elección formal y esa elección le costó la sanción de la empresa, aseguró.
Gustavo Córdoba también fue despedido de la sucursal de Walmart de Avellaneda por organizar a los trabajadores de esa seccional.
Cuando empiezan a relatar los hechos, se mezcla lo anecdótico con lo que consideran “verdaderos atropellos a los mínimos derechos humanos”.
“Por ejemplo, si alguien quiere ir al baño, no puede ir cuando quiere el empleado, sino cuando el gerente dispone”, indicaron.
Aseguran también que, si se forma una pareja entre empleados “contradicen la política de no fraternización que tiene la empresa, por lo tanto, te sugieren que antes de ponerte de novio, le pidas permiso al gerente de recursos humanos”.
Así los hechos se suceden en el relato de estos tres trabajadores, que llegaron a Villa María y Villa Nueva para advertir que el trabajo que ofrece la empresa que empezará a funcionar antes de fines de año en la última localidad mencionada “no ofrece trabajo genuino”.
“Es bueno que los vecinos sepan que de los 120 empleos directos que ofrecieron, sólo el 20% será por tiempo completo, dado que así es en Córdoba y Buenos Aires, como así también en otros lugares del mundo”, indicaron.
El resto, tienen contratos “basura, por menos horas, que hace que cobren 700 pesos, si no tienen fallo de caja”, aclararon.
“Eso no es un trabajo digno”, explicaron los tres, que pese a sufrir persecuciones sin tener amparo gremial (aseguran que el sindicato de Armando Cavaglieri les dio la espalda) siguen adelante “porque la alternativa es luchar o caer esclavizados”.
“Porque para poner en marcha toda esa maquinaria, necesitan que los trabajadores no estén organizados, porque la forma de someterlos es de a uno. Es por eso que prohíben, hasta con la Policía, que sería el brazo ejecutor del gerente de recursos humanos, que se realicen asambleas o elecciones de delegados”, indicaron. “No estamos en contra de Walmart, queremos que genere trabajo genuino”, concluyeron