Un ambicioso proyecto fue aprobado recientemente por la comisión Directiva del San Martín RC, “que cambiará la vida institucional y social del club”, dicen sus dirigentes, a la vez que brindará mayores comodidades a socios y deportistas.
A partir de la venta de una serie de lotes que posee la entidad en adyacencias de su predio en barrio Las Acacias, se va a construir entre la cancha 1 de rugby y la flamante de césped sintético del hockey una moderna edificación de dos plantas que abarcará nuevos vestuarios, gimnasio, dormitorios para concentrar, baños y un salón de confitería. A eso se sumará una nueva cancha de rugby, la denominada número dos, que se ubicará perpendicular a la “uno” y ocupará el sector en donde, actualmente, funciona la sede y bar del club.

Un año visagra

Hay momentos en las historias de cada institución que se producen visagras, hechos o personas que marcan un antes o un después en la vida de una institución, y a partir de estas se generan en estas, casi a modo de “efecto dominó“, una cascada de ideas y de proyectos. Muchas veces esa “visagra” puede ser a partir de hechos positivos o negativos”.
El año 2009 fue visagra para el San Martín, luego que años atrás atravesara una aguda crisis institucional, con intervención incluida de su comisión Directiva y con ello una división que repercutió en lo deportivo.
Superado aquel mal recuerdo de comienzos de la década, un grupo de dirigentes se hizo cargo de la comisión Directiva y empezaron a trabajar en silencio.
El año 2009 trajo aparejado una alegría y una tristeza. El ascenso a primera de las chicas del hockey sobre césped; logro alcanzado por primera vez por un club villamariense que trajo al cierre del año la cuota de alegría. La tristeza fue una nueva decepción en el equipo de rugby que terminó último, potenciado, tal vez, porque su eterno rival, Jockey Club, se consagró campeón del torneo Oficial.

El que empezó

Un dirigente a la cabeza de un grupo laborioso (todos integrantes de la comisión de hockey), impulsó la instalación de la cancha de césped sintético, la primera en el interior de la provincia, y el club cambió notablemente su fisonomía.
El empuje alcanzado por este grupo de dirigentes causó efecto inmediato en otra comisión, la de rugby infantil, que ya ha construido varias canchas de minirugby, a la vez que inició las obras de un sector exclusivo, con oficina, asadores y próximamente salón de “tercer tiempo” para las divisiones formativas.
La inercia de estas dos iniciativas generó una motivación en otros de cambiar otros aspectos al club. Uno sugirió vender unos lotes que posee la entidad en cercanías del country (alrededor de 20) y a partir surgió el proyecto que diseño el futuro arquitecto y octavo del equipo de primera división: Mayco López Grasso.

La obra

Se trata de una construcción de 1.200 metros cuadrados y de dos plantas. En la inferior habrá cuatro vestuarios, sanitarios, un gimnasio y un sector de dormitorios para la concentración del equipo o bien para hospedar a delegaciones visitantes.
En la superior, una confitería con amplios ventanales y balcones hacia ambos costados, desde donde se podrán observar los partidos de rugby y hockey.
Esta construcción se ubicará entre la cancha uno de rugby y la flamante de hockey, donde actualmente hay una vieja construcción.
La ejecución dependerá de otros factores. En estos días quedará inscripta en la Dirección de Inspección de Sociedades Jurídicas el Acta de Asamblea Extraordinaria del 25 de junio pasado, en donde se acepta la “venta con cargo a la obra” de los mencionados lotes. Una vez inscripta, habrá factibilidad para la venta de los mencionados terrenos y empezar a cimentar esta nueva idea.
A partir de ese momento comenzará a ejecutarse la primera parte del proyecto que tiene perspectivas de cambiar la vida de la institución a nivel social y deportivo.