La magistrada de Faltas, una mujer de perfil bajo y que le huye a los escándalos mediáticos, no se guardó nada en el escrito que dirigió a los legisladores locales. Y allí apuntó hacia el subsecretario de Seguridad Ciudadana de la gestión de Guillermo Cavagnero, Fabián Pastorak.
Cuando se refirió a las actas nulas, advirtió que “si adolecen de elementos esenciales (como el nombre, apellido, dirección, DNI, tipo contravencional, etcétera), no es responsabilidad de los inspectores, sino del responsable jerárquico, que es quien imparte las órdenes y que denota un total desconocimiento jurídico”. “Es necesario entender que no son los bienes muebles registrables los que producen la conducta tipificada por la norma, sino las personas”, destacó.
Lilián Sosa se encargó, desde el inicio del escrito, de barrer con las declaraciones del funcionario del Departamento Ejecutivo Municipal (DEM).
Pastorak había dicho a EL DIARIO, el 23 de julio, que se labraban entre 30 y 50 actas diarias, por lo que el Juzgado de Faltas “no da abasto”, demandando así la creación de otro, tal como lo planteó el Gobierno.
La jueza lo desmiente en este escrito que llegó al Deliberante: “Sólo se reciben en mi Juzgado un promedio mensual de 13 actas de infracción diarias, es decir, mensualmente ingresan al Tribunal entre 350 y 497 actas de infracción”.
“Por lo tanto, en ningún momento he recibido las actas que Pastorak dice que labra, que conforme lo que expresa son de 30 a 50 diarias, lo que matemáticamente nos daría un resultado de 900 a 1.500 actas de infracción mensuales”, explicó.
“Esta disparidad con la realidad de actas que esta magistrada recibe es lo que me ha movilizado, en resguardo de la institución que represento y esencialmente de nuestros ciudadanos, que podrían verse perjudicados y así también afectar el decoro de la Justicia Municipal de Faltas que durante estos años he tratado de enaltecer con resoluciones emanadas bajo las previsiones legales, en un marco de equidad, resguardando la defensa en juicio y esencialmente la seguridad jurídica, sobre la base de una estricta correspondencia entre el acta de infracción y la resolución”, declaró.
La funcionaria fue luego más allá, al preguntarse si “estamos en presencia de un juzgado paralelo”, al interrogarse adónde van a parar las actas que no llegan a su despacho. Pide, incluso, que se investigue el destino de las mismas, siempre basándose en las declaraciones que Pastorak formuló a este matutino.
“Como es público y notorio, el funcionario tiene por costumbre opinar sobre lo que no conoce. No conoce sobre el funcionamiento del área a mi cargo, desconoce el derecho vigente en esta ciudad y esencialmente desconoce el procedimiento administrativo. Como de costumbre, se extralimita en sus funciones, ataca la idoneidad de esta juez y el decoro del órgano que represento”, disparó.