Un escrito que revela circunstancias de gravedad institucional quedó en manos de los ediles villanovenses, tras ser enviado por la jueza de Faltas, Lilián Sosa.
La magistrada apuntó en el mismo diversas situaciones que denotan corrupción e ineficacia en Seguridad Ciudadana, que es conducida por Fabián Pastorak, con quien la jueza mantiene una conocida disputa desde el año pasado.
Ni los concejales ni Sosa realizaron declaraciones en las últimas horas.
La titular del Tribunal Administrativo de Faltas no sólo expone que el 42% de las actas que labran los inspectores son inválidas, por carecer de elementos esenciales, sino que desnuda actos que evidencian corrupción.
“En numerosos casos se labran dos actas de infracción, es decir, se labra un acta por un hecho que requiere de remisión del vehículo al Juzgado, pero luego, por una relación presuntamente de amistad o por algún otro tipo de compromiso, se elimina el acta originaria -que consta que se remite al Corralón- y se sustituye por otra acta que contiene otro hecho”, denunció Lilián Sosa.
“También se labran actas por las que el infractor se apersona al Juzgado, pero como se demoran en ponerlas a disposición del Tribunal, el infractor concurre al Corralón y se le entrega la unidad. Este acta nunca más se envía a este tribunal como remitida, porque la entrega de la unidad ha sido directamente desde el Corralón Municipal”, reveló textualmente la magistrada de Faltas.
En este sentido, la funcionaria precisó que “de esta manera se le entregó un automóvil 0 kilómetro a la firma Veneranda, que dejó la documentación del bien en el Juzgado, pero el acta de infracción nunca arribó al Tribunal”.

Extravíos

En tanto, en otro pasaje de su texto, hizo referencia al servicio de correspondencia y notificación, “indispensable para cumplir con la función de este Juzgado”.
“Es público y notorio que durante un año y medio careció el Tribunal de este servicio postal para las actas cuyos presuntos infractores se domiciliaban en otra localidad. Dicho servicio se restableció en junio de 2009, por lo tanto la demora de todas esas causas eran por dicho motivo. Sin embargo, el Tribunal seguía realizando su trabajo normalmente, ya que surgen de las cédulas la fecha de expedición por parte del Juzgado y la fecha de diligenciamiento por el servicio postal o notificadores. Hay muchas cédulas pendientes de rendición”, señaló.
Entonces, precisó: “Existen demoras de causas que no han sido rendidas al Tribunal y que se reclaman a las oficinas pertinentes. En el caso de Oficina de Notificadoras, se han extraviado numerosas piezas, es decir, cédulas de notificación”.
En este punto, Sosa indicó que el extravío se da “sin poder dar una explicación ni establecer de qué causas se tratan”, lo que “implica para el personal del Juzgado una doble tarea, para ejercer el control y hacer nuevas notificaciones”. “Además -añadió- constantemente se le reclama sobre cédulas que no se diligencian”.

No sirven

La magistrada volvió a exponer un cuadro que se hizo público en 2009, relacionado con actas inválidas por no contar con los elementos necesarios.
“Un porcentaje de aproximadamente el 42% de las actas que ingresan mensualmente para su tramitación (entre 350 y 497), carecen de los elementos esenciales, es decir, presentan vicios que las invalidan. No cuentan con los elementos esenciales que permitan producir efectos jurídicos”, expuso en el escrito.
Sosa graficó con un ejemplo, el del mes de febrero de este año: de 479 actas recibidas, 242 carecían de elementos esenciales.

Las fotos:
1- Lilián Sosa evitó realizar declaraciones a EL DIARIO, pero su escrito a los ediles fue elocuente. Evidenció un gran escándalo
2- El tránsito sin control. Hay inspectores en la calle, pero en el 42% de los casos la Justicia no puede actuar, según reveló la propia magistrada de Faltas