Liliana Alvarez encabeza un grupo grande de gente linda de esta ciudad que dedica parte de su tiempo a recoger perros de la calle, curarlos, alimentarlos y darlos en adopción. Crearon la “Casita Pata Pata” y se definen simplemente como “mascoteros”.
Todo funciona en el domicilio de Liliana, en Ituzaingó 62, de barrio Lamadrid. Hasta allí llegan Juan, Ivana, Lito, Ana, Nati, Sergio, Laura, Celeste, Erika, Mabel, Kati... Se acercan hasta la “Casita...” o se comunican telefónicamente, por Internet, a través de Facebook... Intercambian información sobre la aparición de un perro abandonado en tal calle o en tal barrio, y hacia allá parte Lito, que es remisero y es de fierro. Está encargado de traer al animal o de llevarlo a la veterinaria... El forma parte de esta movida “mascotera” que nació, se alimenta y crece en la ciudad. Y que merece ser contada por varios motivos: uno de los principales es que ellos mismos asumen los costos de las vacunas, los medicamentos, el alimento, los traslados...
Ayer había 17 perros en el coqueto albergue existente en los fondos de la casa de Liliana. El sábado último, Juan (que en realidad no es otro que Juanjo Romiti) fue con un grupo de amigos para realizar los murales que aparecen en las fotografías.
Pero la “Casita” de la calle Ituzaingó llegó a albergar hasta 32 animales, incluido un felino llamado “Gata Loca”, dado que pernocta echado entre los perros.
Y si el lugar no es suficiente poco importa, porque Kati tiene otros siete animales en su casa y Sergio cinco más en un predio contiguo al Parador del Camionero.
“Con la ayuda de Juanjo desde su programa de radio en el Grupo Centro llegamos a dar hasta cuatro perros por día a familias seguras”, cuenta Liliana.
Y enseguida destaca que el trabajo no termina allí, porque “existe toda una metodología para tratar a los animales y en muchos casos vamos a las veterinarias para realizar castraciones a las hembras, para que el problema de los perros callejeros no se multiplique”.
“Todo es muy costoso y la verdad es que nos vendría bien que la gente nos ayude con balanceado o apadrinando alguno de los perritos que estamos curando de sarna o de cualquier enfermedad, porque hay momentos en que los bolsillos no nos alcanzan”, agrega.
Quienes quieran colaborar, pueden comunicarse al teléfono (0353) 154254440 o bien concurrir a Ituzaingó 62. El contacto también se puede realizar a través de las cuentas de Facebook Liliana Alvarez o Casita Pata Pata, donde se multiplican capítulos de esta misma historia que se escribe todos los días en la ciudad.


S.V.