Entre tantas despedidas, Alem tuvo un regreso esta temporada que sirve para seguir aportando experiencia: Diego “Catoca” Rivera.
El mediocampista fue uno de los artífices de la victoria del domingo, ante Argentino, y también destacó la mística que debe cuidar el equipo, aunque tengan un mix de grandes y juveniles.
“La mayoría del equipo son chicos de las inferiores que saben lo que es jugar en Alem, saben que acá hay que dejar todo en la cancha y no regalar nada”, puntualizó Rivera, quien retornó después de un paso por Colón.
Sobre la victoria, “Catoca” reconoció que se hizo “un gran partido”.
“Creo que tuvimos momentos buenos, otros en los que no se pudo jugar, pero pusimos actitud y ganamos un partido importante”, destacó.
En ese aspecto, dijo que la clave fue la serenidad del grupo, más allá de la calidad del rival.
“Argentino tiene un gran equipo, pero no nos desesperamos por ir a buscar un resultado, mantuvimos la calma y eso fue importante”, opinó.
Luego de sostener que se practicó en la semana “sabiendo que se podía ganar con goles de pelota parada”, Rivera no pudo ocultar la felicidad por su conquista personal.
Desde casi 40 metros, Rivera vio boyando una pelota que despejó Claudio Andrada (devenido en arquero tras la expulsión de Bazzani), entonces probó al arco, acertó y salió a festejarlo con locura. Fue el 3 a 1 decisivo.
“Es el primer gol que hago desde tan lejos, casi de mitad de cancha, así que estoy muy contento por eso”, reconoció el villanovense.
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