Al finalizar su disertación, Tomás Oesterheld dialogó con El Diario Rural, manifestando que la incorporación tecnológica presentada "es porque el control de los procesos georeferenciados está viniendo abruptamente, tanto en las maquinarias como en los controles satelitales, para que los productores puedan producir mejor en todos los ambientes de su campo y con más eficiencia".
"Hay muchos productores que están comenzando a trabajar con mapas, con fotos satelitales, con monitores de rinde, haciendo muestreos georeferenciados de suelo, y toman conciencia que dentro de los lotes que se trabajaban de manera unificada hay situaciones muy diversas, por lo que debe cambiar la forma de trabajo", explicó.
Para él, "una de las cosas que nos lleva a difundir estas metodologías es el crecimiento vertical de la producción, ya que el alto valor de la tierra hace que el único productor que puede permanecer en el sistema, debe ser altamente eficiente".
"El paso más importante que da un productor es tener claro que hay muchas nuevas tecnologías que lo pueden ayudar, es pedir ayuda, darse cuenta que las tecnologías avanzan en forma muy rápida y en muchos sentidos, con las semillas, las técnicas de siembra, los controles, hace que sea imposible que un productor pueda trabajar solo, por eso al incorporarse a equipos de trabajo, al recibir asesoramiento, puede producir más y mejor."
Hay grupos de productores que están formados y formándose, avanzando en el sentido de estudiar y profundizar conocimientos de cada región, el INTA trabaja también en muchas regiones del país para avanzar en los conocimientos geoambientales de todo el país, buscando certezas de la variabilidad ambiental y todos juntamos información más que importante, a la que “hay que sacarle el jugo”.