Eran las 5 de la mañana del sábado y Ariel Saire (36) y Eduardo Maidana (23) no habían podido conciliar el sueño. La emoción y los nervios a horas de contraer matrimonio iban en crecimiento.
Apenas cerraron sus ojos unas horas y temprano estuvieron envueltos en los preparativos de la boda.
A las 11.20 del sábado 29, se convirtieron en la primera pareja homosexual en contraer enlace en Villa María.
Ariel y Eduardo comenzaron a escribir su historia de amor hace tres años y medio, cuando el primero se encontraba haciendo una práctica de Enfermería en el Hospital Regional Pasteur. Eduardo llegó al nosocomio para visitar a un pariente que se encontraba internado y el flechazo entre ambos fue inmediato. A la semana estaban juntos, por la intermediación de unos amigos.
Hace tres años que conviven y dicen que soñaron con casarse desde los primeros meses de la relación.
“Están formando parte de la historia de Villa María. En nombre del Registro Civil y de la Municipalidad los felicito por la decisión que han tomado”, les dijo la jefa del Registro, Elizabeth Bergero, en la ceremonia llevada a cabo en la víspera en el Salón Blanco del ex Palace Hotel.
“Les pido que sepan llevar esta tarea que será difícil pero no imposible porque hace mucho que ustedes están juntos”, agregó la funcionaria, y posteriormente les leyó un poema de amor.
Al lado de los novios se encontraban Claudia, Walter, Gabriel y Mariela, los testigos. Alrededor, cámaras de televisión y de fotógrafos, junto a varios cronistas.
La presencia de los medios de comunicación molestó a la titular del Registro Civil, quien en un principio habría querido que la prensa aguardara fuera del Salón Blanco. En un momento de la ceremonia, la interrumpió para pedirle a una periodista que baje la voz. Ocurrió que las radios comenzaron a salir en vivo y se notó el bullicio en la sala.
Cuando Bergero pronunció que, en nombre de la ley, los declaraba “unidos en legítimo matrimonio”, Ariel y Eduardo se besaron y dejaron soltar las primeras lágrimas.
Al finalizar el oficio, sus familiares y amigos gritaron y expresaron su alegría. No se observaron grupos que militan por los derechos de las minorías y no hubo curiosos.

Camino a la adopción

Ariel adelantó a los medios que lucharán por tener un hijo. “Estamos preparados y capacitados para criar a un niño”, aseguró, al tiempo que remarcó que la boda le produce “una sensación muy rara, que hay que vivirla para saber lo que es”. Consideró “un logro” el matrimonio y precisó que comienza “una nueva etapa”.
Eduardo, por su lado, se mostró sumamente emocionado, al punto tal que por momentos se le cortaron las palabras. “Estuve muy nervioso y no quería equivocarme al hablar. Cumplí mi sueño. Ahora es cuestión de pelearla día a día para estar juntos”, señaló.
“La unión cambia la vida. Quería casarme para estar más unidos y más cerca, ahora la pelearemos juntos”, resaltó.
Saire pidió a la sociedad que “abran las puertas de sus corazones porque todos merecemos esta oportunidad”.
Los chicos se retiraron del Palacio Municipal pasado el mediodía y sus familiares los felicitaron entre lágrimas. Los esperaba un gran almuerzo, aunque no se organizó fiesta ni viaje.
Saire es enfermero pero no está trabajando actualmente, mientras que Eduardo se desempeña como personal de seguridad.

“Fue un acto respetuoso”

Abordada por EL DIARIO tras la ceremonia en que se concretó el primer matrimonio entre personas del mismo sexo en Villa María, la jefa de Registro Civil, Elizabeth Bergero, valoró “el respeto” que distinguió a la misma.
“Le pedí a una cronista que bajara la voz porque me interesa que haya respeto, como en cualquier ceremonia. Los chicos estaban en un momento especial de sus vidas y me gusta cuidar eso”, explicó.
La funcionaria indicó que pese a que hay consultas, no hay turnos dados para otro casamiento entre homosexuales.
Mujer del teatro, con una hija directora de cine, Bergero proviene de un ambiente liberal y apoya el matrimonio gay.