Tras cinco días de agonía y sin haber salido del grave cuadro que lo llevó a la unidad de cuidados intensivos, falleció ayer por la mañana Fernando David Capellino, de 20 años, quien se había accidentado con su motocicleta el pasado sábado por la tarde en el barrio Vista Verde de esta ciudad.
Como consecuencia del violento impacto sufrido por Fernando, no tardaron mucho los médicos de la Clínica Fusavim, donde fue internado tras ser revisado en el Pasteur, en advertir que el cuadro general era grave, aunque, en una primera instancia, albergaban alguna expectativa. Pero las esperanzas se fueron diluyendo con el correr de las horas y los días. Y a pesar del esfuerzo realizado por los profesionales de la salud, el deceso fue inevitable.

Complicaciones

Primero, los médicos comprobaron que era prácticamente irreversible la pérdida de la vista y el oído.
El miércoles, el joven accidentado hizo un cuadro de neumonía y eso complicó aún más las cosas. No tardó en sobrevenir la muerte cerebral.
A las 8.45 de la víspera, Fernando Capellino dejó de existir en la sala de cuidados intensivos de la mencionada clínica.
Sus restos fueron velados ayer en la sala de servicios fúnebres de la Empresa Paviotti, ubicada en Catamarca y Parajón Ortiz, y serán sepultados hoy, a la 10, en el cementerio parque La Naturaleza.
El joven motociclista vivía en la calle Piedras 1992 de barrio San Justo y trabajaba en un taller de refrigeración.Tenía un hermano y su padre es empleado de una conocida casa de venta de electrodomésticos de esta ciudad.
Hubo congoja y consternación en todo el vecindario, ya que se trata de una familia muy apreciada.

El accidente

El accidente que le costó la vida a Capellino tuvo lugar, como ya se dijo, el pasado sábado, a las 16.45, en inmediaciones de la calle Río Paraná y costanera, detrás del predio de la Casa de la Familia.
Allí, por razones que se tratan de determinar, el muchacho perdió el control de su motocicleta Stroke 125 centímetros cúbicos patente 756 CPS y fue a parar al suelo, golpeando su cabeza, aparentemente, con el cordón cuneta, según evidenciaron las manchas de sangre encontradas en el lugar minutos después del accidente y cuando ya había sido trasladado.
Como consecuencia de la violenta caída, Capellino sufrió un severo traumatismo de cráneo con una importante pérdida de sangre.
Inmediatamente, el muchacho fue trasladado en una ambulancia de los Bomberos Voluntarios hasta el Hospital Regional Pasteur, donde se le practicaron las primeras curaciones y le fueron diagnosticadas lesiones graves.
Desde el centro de salud de la calle Mendoza fue derivado hasta la Clínica Fusavim, donde ayer a la mañana falleció.