Bajo la conducción inicial de su propietaria, Sandra Bailone, esta revista villanovense dio sus primeros pasos y comenzó a transitar su camino el 6 de septiembre de 1996.
Como aquel pueblo que casi se recorría con una ligera mirada… como el Parque que luce el paisaje más verde e imponente con sus callecitas con tierra de mi Villa… como el río acariciado por sus sauces… como mi plaza, el Club Alem y la escuelita… como los carros, el chisme urgente y la gente de mi Villa. ¡Así dibujamos a “La Vidriera”! Con simpleza. Con carisma y alegría. ¡Bien villanovense! De alpargatas, sincera y amiga.
En la mesa de “La Vidriera” se sentaron sus hijos y amigos… desde el más informado y preparado al más ignorante de los hombres. Con mate, vino de por medio o una ligera comida armamos lo que tanto hemos divulgado ¡hablamos de una familia! En esa mesa o rueda de amigos donde la casa nunca resultó pequeña, cocinamos miserias, tristezas y alegrías, nos reímos de los cuentos de “Tito” y, sin discursos ni protocolo ni la voz de un mandamás, se sirvió la caricia urgente y la mano tendida.
En este maravilloso grupo nos respaldamos en lo esencial… en la armonía, en la unidad y alejados de una mesa chica ofrecimos participación e integramos, sin caciques, a todos los indios. En pocas palabras… todos fuimos madre y padre de esta querida “Vidriera”. Es oportuno remontarse a aquellos meses previos a setiembre de 1996, cuando “La Vidriera” apenas era un proyecto… casi irrealizable. Tres fueron las metas trazadas en un comienzo, primeramente que la revista de Villa Nueva fuera un ejemplar gratuito sostenida únicamente por el espacio publicitario, o sea no seleccionar al lector y difundirla linda, cálida, pintoresca y sin costo para nuestra gente. Lo segundo fue que del mismo modo que no seleccionaríamos al lector, tampoco lo haríamos con el escritor: quien quisiera podría expresarle libremente y a nadie se le censurarían las notas ni se le cuestionarían las ideas… y, por último, “La Vidriera” sería una gran familia basada en la amistad y la lealtad; aquí no se cocinarían chismes ni competencias, ambas cosas sólo llevan a la destrucción.
Durante todos estos años quien no entendió la idea, seguramente, no estuvo a gusto entre nosotros. Cometimos errores, como también nos servimos de algunos logros, todo ha sido útil, los errores más los logros no son otra cosa que “aprendizaje”.
Por nuestras páginas pasó de todo, la historia de nuestra gente y de nuestra Villa, auspiciantes que nos apoyaron, colaboradores y amigos que incondicionalmente nos dieron lo mejor.
A partir de hoy trataremos de agrandar nuestra mesa, en ella hay muchos sitios vacíos. Es esta la oportunidad de invitar a nuestros amigos y de ocupar los lugares de aquellos que fueron parte de “La Vidriera” y se alejaron para siempre como “Tito” Suárez, Hugo Montero, “Coco” Bailone, Pablo Granado, Armando Fabre.
La idea es sumar, o sea, sinónimo de crecimiento. Sólo pretendo una mesa que nos sorprenda codo a codo y bien apretados, porque cuando ésta resulta inmensa significa que “la forma” es inapropiada.
Tres años del Periódico “Villa Nueva Punto y Coma”
Desde setiembre de 2007, hay una publicación en Villa Nueva que permite a los vecinos de la ciudad expresar sus opiniones, reflexiones e ideas sobre la realidad social y política local, provincial y nacional. Al mismo tiempo es un canal de comunicación para aquellos villanovenses que, interesados por los sucesos políticos y sociales, se sumergen en sus páginas compartiendo las reflexiones y las crónicas elaboradas por los escritores.
Esta publicación nació con espíritu libre, como la opinión. Salió a la calle llevando en su interior las apreciaciones y puntos de vista de vecinos que se preocupan y ocupan de lo que sucede en nuestro entorno, manifestando sus disgustos, sus cuestionamientos y propuestas para mejorar. Nació llevando en su interior algo que pocas veces es posible difundir: la voz de personas del pueblo.
El camino recorrido hasta aquí no es demasiado extenso, pero eso no impide que haya sido y sea intenso. Es grande el esfuerzo que se realiza para que la publicación se sostenga; pero el sacrificio vale la pena cuando se trata nada más y nada menos que de la libertad de decir.
Trabajamos para continuar el camino hasta aquí trazado, llevando la voz de las personas del pueblo a sus vecinos y participando a través de la opinión en los asuntos de interés común, tal como la democracia lo ordena.
Cambio de autoridades:
Hoy, en oportunidad de festejarse los 14 años de “La Vidriera de la Villa” y el Tercer Aniversario del Periódico “Villa Nueva, Punto y Coma”, asumirán los nuevos directores:
-Trinidad Morales de Galera en “La Vidriera de la Villa”: es una de las pioneras de “La Vidriera”, escribe en la publicación y participa activamente en su sostenimiento aportando esfuerzos para el crecimiento de la misma.
-Lisandro Piacentini en “Villa Nueva, Punto y Coma”: escribe en la publicación casi desde los comienzos y ha desempeñado un importante rol como escritor y colaborador de la misma. Su iniciativa juvenil hace de él la persona indicada para la dirección de una publicación joven con todo un futuro por delante.
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