Se realizó ayer en Villa María una marcha para pedir a las autoridades que eviten el asentamiento de Innviron, la empresa que actualmente tiene a su cargo el enterramiento de los residuos sólidos urbanos y que en pocos meses empezaría -tal como lo autoriza la ordenanza- a procesar la basura para convertirla en energía.
Dado que el sistema utilizado denominado gasificación es comparado con la incineración por los ambientalistas, las organizaciones sociales y los estudiantes secundarios y terciarios realizaron ayer una marcha en la ciudad.
Primero se concentraron en la plaza Centenario y de allí partieron a la Municipalidad, donde ingresaron al hall del ex Palace para entregar un petitorio al intendente y a las autoridades del Concejo Deliberante.
En la nota, piden que Innviron no se radique en la ciudad “porque emite dioxinas y furanos” en el proceso de gasificación, “lo que provoca cáncer y otras enfermedades”.
Junto a los estudiantes, había vecinos de la zona rural que explicaron que la política local es contradictoria: “Por un lado, dicen que hacen gestiones para que exportemos nuestros quesos a Europa y por otro lado, quieren quemar la basura de media provincia en nuestra cuenca láctea”.
Los docentes presentes dijeron que “no todo está perdido. Muchos creen que ya está cerrado el trato, pero así como no los dejaron entrar a Río Cuarto y Córdoba, el pueblo puede impedir que ingresen a Villa María”.