Escribe: Oscar Pérez
En un partido en el cual se esperaba mucho de los dos conjuntos, finalmente se vio muy poco. Y ello explica lo que aconteció en el inicio a tal punto que la primera ocasión de riesgo llegó a los 17´ minutos tras un lateral-centro que terminó con el remate improductivo de Ledesma dentro del área cuando la jugada pedía centro atrás.
El partido fue muy trabado en mitad de cancha, con pocos pases cortos sin profundidad y abuso del pelotazo. La única situación para la visita en la primera mitad se dio tras un pelotazo a la espalda de los centrales “gallegos” que el arquerito de Española, rápido de piernas, salió a cortar pero cometió falta en el borde del área. El tiro libre, igual, no fue aprovechado en la única situacion con algo de riesgo que generó.
La segunda mitad tuvo al local con otra actitud y ello quedó evidenciado al minuto nomás, cuando Mignola desbordó por izquierda y envió el centro para Tejeda, quien igual remató con poca puntería y por encima del travesaño, desperdiciando la oportunidad más clara hasta el momento.
El cambio de aire que tuvo el partido se dio gracias a la presión del mediocampo local que comandó su capitán y que le permitía recuperar la pelota en el campo rival. No obstante, falló constantemente en el pase final y entonces no progresó en ataque.
A los 18’, Tejeda tuvo su segunda ocasión de gol después de un pase entre líneas de Moreno y el delantero, ante la salida del arquero, la tocó con mucha clase a un palo pero con poca efectividad.
Más allá del dominio de Española, a los 26’ Mujica recuperó la pelota en mitad de cancha y, tras encontrar por primera vez a la defensa gallega mal ubicada, quedó mano a mano con Gómez, quien rápido de reflejos tapó el tiro pero el rebote le cayó a un Servetti que sólo debió darle un pase a la red marcando así el uno a cero inmerecido para la visita.
Igualmente, los pibes de Española, con más corazón que fútbol, siguieron yendo al frente y alcanzaron el merecido empate a los 35 minutos cuando Tejeda, en el segundo palo, metió la pelota en el corazón del área y allí apareció Zanotti para empujar el balón al fondo de la red y desatar el desahogo del banco local.
Así concluyó el empate que se dio en el “prado”, desde donde Playosa se llevó un empate muy valioso por lo que mostró dentro de la cancha.
Otras notas de la seccion Deportes
El peor Agosto de su vida
Argentino, campeón
Jockey no pudo con Athletic
Otra victoria del "Sanmar"
Villa María, subcampeón
|