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El sacerdote Nicolás Allesio (quien quedó, precisamente por su posición a favor del matrimonio homosexual, fuera de la Iglesia Católica) se ofreció ayer a bautizar a la beba que tendrá la pareja, la que atraviesa el quinto mes de embarazo.
Tal como publicó EL DIARIO en junio pasado, Valeria está embarazada gracias a someterse a un tratamiento de inseminación artificial, un método de reproducción en el que el esperma es depositado en la mujer mediante instrumental especializado.
Valeria lució ayer muy elegante con su pancita y trascendió que esperan a una niña.
Daniela la había visto en el Mercado de Abasto y se había sentido atraída totalmente por ella. Poco después, decidió presentarse en su negocio. Un remisero amigo descendió del vehículo y le dijo a Valeria que alguien quería conocerla. Valeria salió a la vereda y se impactó “con su belleza”. Se fueron charlando hasta la casa de Daniela y así comenzaron a desandar su vibrante historia de amor. Fue hace ocho años.
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