Como ya es costumbre, se celebró ayer la Fiesta del Día de la Madre en Tío Pujio. Mil mujeres concurrieron a la velada que se llevó a cabo en las Instalaciones del club Hipólito Yrigoyen.
En la puerta, las esperaba una comitiva del equipo de Gobierno local, encabezada por la propia intendenta, Nancy Schiavi, quienes las recibían con una rosa para cada una, a modo de perfumado pasaporte a una verdadera fiesta.
Madres de todas las edades fueron ocupando las mesas dispuestas a lo largo del salón para disfrutar de los distintos platos que eran ofrecido por 40 jovencitas estudiantes que de manera voluntaria servían a la concurrencia.
Mientras tanto, los números musicales y humorísticos se sucedían sobre el escenario.
Acompañaron a la intendenta Schiavi en este homenaje a las madres tiopujienses el subsecretario del Ministerio de Acción Social de la provincia, Darío Ranco; el legislador Marcelo Frossasco, la presidenta de la Fundación Banco de Córdoba, Alicia Giubergia; el intendente de Santa Eufemia, Gerardo Allende, y todo el equipo de Gobierno de la vecina localidad, quienes trabajaron durante cuatro días full time para que nada quedara librado al azar.
La fiesta, que contó con la animación del locutor villamariense Héctor Farías, comenzó con un emotivo vídeo proyectado en pantalla gigante que robó suspiros a las damas presentes.
Luego, siguió la música, en la voz de cabralense Gustavo Ruso, el humor y las canciones de El Show de la Gente y los chistes de El Bombo Contrera, en todos los casos, con la masiva participación de las homenajeadas, quienes cantaron, bailaron y rieron sin inhibiciones.
Así, llegó la hora del helado.
¿El postre? Como todos los años, fue una sorpresa: “La Sole”. Y el salón del club estalló en algarabía.