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Tres de los vecinos que fueron a la reunión decidieron concurrir hoy a los Tribunales para formular sus respectivas denuncias. Comprendieron que la peor opinión es el silencio... |
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Más de una veintena de vecinos de Villa María, Villa Nueva e incluso de la región acudieron anoche a la convocatoria efectuada por el sacerdote evangélico Ricardo Rivarola para organizarse legalmente en relación a los casos de abuso policial que se vienen sucediendo en los últimos tiempos.
Los concurrentes, en su mayoría víctimas del reprochado accionar de la Policía de la provincia, no sólo expresaron su preocupación por la gran cantidad de excesos registrados en diferentes puntos de la ciudad, a toda hora y principalmente con ciudadanos comunes que van o vuelven de sus trabajos, sino que trazaron un plan de acción que tiene fundamento en el marco jurídico que rige el estado de derecho imperante.
Luego de exponer los más variados y sorprendentes episodios que los tuvieron como damnificados, varios de los asistentes al encuentro acordaron presentarse en los Tribunales locales para que sea la Justicia la que intervenga directamente en la investigación de los hechos.
@A la Fiscalía
Así, tres de las víctimas decidieron acudir durante la mañana de hoy a la Fiscalía de Instrucción que está de turno para formalizar sus respectivas denuncias penales, y para ello resolvieron hacerlo en forma conjunta y acompañados por Rivarola.
El religioso no sólo tiene conocimiento de los procedimientos legales por haber sido funcionario de la Policía Federal años atrás, sino también porque está agrupando toda la información relacionada con los sucesos de abuso policial que se hicieron públicos a través de las páginas de EL DIARIO desde fines de agosto.
Rivarola, cuyo hijo menor fue maltratado por personal del Comando de Acción Preventiva en un irregular procedimiento, ya entabló contacto con la presidenta del Tribunal de Conducta Policial y Penitenciario de la provincia de Córdoba, la ex concejala villamariense Ana Becerra, quien se comprometió a investigar a fondo, y de oficio, la seguidilla de abusos producidos en las últimas semanas.
Sin embargo, ante la reiteración de hechos de esa naturaleza (según se conoció anoche, el lunes se registró otro atropello policial en perjuicio de una joven de 20 años y dos amigos que caminaban por calle Mendoza, cerca de la costanera, en plena tarde), el sacerdote decidió avanzar con la organización de los vecinos para dar intervención a la Justicia como primer y fundamental paso.
@Valioso aporte
A la reunión convocada en la sede del Centro de Periodistas “Lucio Capdevila” asistió el padre José Miguel Marengo, de la Iglesia de los Padres Trinitarios, quien desde hace mucho tiempo viene colaborando con ex presidiarios que procuran reintegrarse a la comunidad, laboral y socialmente, tras purgar una condena en la cárcel local.
El religioso aportó importantes ideas para que los vecinos sepan cómo defender sus derechos ciudadanos, aunque advirtió que no son pocos los inconvenientes que tienen los ex convictos a los que pretende ayudar a socializarse, ya que suelen ser víctimas de persecuciones por parte de algunos funcionarios policiales.
La labor del padre Marengo no es desconocida para los villamarienses. Para más datos, a fines de julio pasado publicó en las páginas de este matutino una emotiva carta en la cual hizo referencia “a la injusta detención” de su amigo Raúl Cardoso.
“En él quiero recordar y hacer presente a todas aquellas personas que son perseguidas, detenidas o acosadas, simplemente por la portación de rostro o la injusta ley de merodeo, que sólo hace crear más malestar en la sociedad y vulnera los derechos fundamentales de la libre circulación”, destacó el sacerdote en aquella oportunidad, para luego asegurar que “son muchas las personas atropelladas en búsqueda de la seguridad; como le dijeron a una persona, tus antecedentes te condenan”.
@En comunión
Con su presencia en la reunión de anoche, el padre Marengo se sumó a la valiente decisión de Rivarola de hacer frente -obviamente en el marco de la ley- a una problemática a la que muchos le escapan por temor o desconfianza. Temor a represalias por parte de la Policía, y desconfianza en la Justicia, muchas veces cuestionada por su deficiente labor, o lo que es peor, la falta de compromiso de muchos de sus funcionarios.
Por lo pronto, ese puñado de vecinos que se dio cita en el Centro de Periodistas dio el puntapié inicial para que otros ciudadanos rompan las barreras del “no te metás” y salgan a defender sus derechos.
El primer gran paso de la incipiente agrupación de vecinos autoconvocados será concurrir hoy mismo a Tribunales para radicar las denuncias que no hicieron en su momento, y para ello contarán con la compañía del sacerdote evangélico.
Pasadas las 22.15, los asistentes al encuentro de la víspera decidieron también volver a reunirse el próximo jueves 9, a la misma hora (20.30) y en el mismo lugar (Mendoza 1660), para analizar los próximos pasos a seguir, justo en víspera de la visita del prestigioso abogado porteño Horacio Ravenna, quien vendrá a Villa María para dictar un seminario-taller sobre derechos humanos a unos 140 aspirantes a agentes policiales y más de una veintena de efectivos de la Unidad Departamental San Martín.
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