Se conoció ayer un nuevo conflicto laboral que involucra al secretario de Gobierno de la Municipalidad de Villa Nueva, Alejandro Díaz.
El concejal radical Javier Pérez planteó en la sesión habitual del Concejo Deliberante (desarrollada al mediodía y que se extendió por casi dos horas) un caso que tiene al alto funcionario como protagonista, junto a un ex trabajador de la comuna.
Según reveló el edil, un hombre que cumplió la función de guardacosta en el último verano le inició juicio al municipio luego que Díaz quisiera abonarle su sueldo con cheques “que podía cobrar muchos meses después”, incumpliendo así el contrato.
Pérez remarcó que “el municipio, o sea todos, porque es con fondos públicos, debe abonar 13 mil pesos en esta causa”, ya que la Justicia le dio la razón al ex bañero, del que Pérez mantuvo el nombre en reserva.
“Ante esto, se arregló un pago de 6.500 pesos. O sea, que por no querer abonar un sueldo, se termina pagando una cifra de estas características. Por arrogancia o ignorancia se realizó una mala gestión y ahora hay que pagar esto”, expresó.
Si bien el legislador local evitó identificar al funcionario, con el correr de los minutos todos dieron cuenta de que se hablaba de Díaz.
Las idas y vueltas verbales entre los concejales en torno al tema, dejó trascender un episodio que no había salido a la luz pública, y que denota gravedad institucional: se conoció que el intendente Guillermo Cavagnero debió pedirle disculpas (por escrito) a la familia de un empresario fallecido en nombre de su actual secretario de Gobierno (en ese entonces a cargo de la Secretaría de Gestión, Planificación y Finanzas), ya que éste último se refirió a su homosexualidad con términos injuriosos (“p... de mier...”).
Asimismo, en el recinto se trajo a colación el fallo adverso a la comuna en el conflicto entre Díaz y la delegada de los trabajadores Mónica Gramaglia.
Como se recordará, la empleada había obtenido un adelanto en sus haberes que el municipio debía descontárselos en cuotas, pero por decisión del funcionario se le procedió a hacerlo de manera completa, lo que ella vinculó a una acción intimidatoria por su labor sindical.
La Justicia le dio recientemente la razón a Gramaglia, hecho que ayer reflejaron los concejales.
Todas las fuentes del Poder Legislativo consultadas por EL DIARIO coincidieron en evidenciar el malestar por “la soberbia y el desempeño” de Díaz.
Como se conoce, la mayoría de los legisladores expresaron en numerosas ocasiones su desagrado por “el ninguneo” que el secretario de Gobierno le hace al cuerpo parlamentario que preside Mauro Bizzarri, un hombre del riñón de Marcelo Frossasco.