Mientras se espera que el delantero Carlos Paratore se sume hoy a los entrenamientos de Alumni, los dirigentes anunciaron la llegada del enganche Matías Fernández y tratan de cerrar con un defensor central, antes del fin de semana. Paratore tiene acordada su incorporación al equipo y el entrenador Mauricio Magistretti lo espera con los brazos abiertos, ya que había solicitado un delantero de sus características, es decir, con velocidad, capacidad para desbordar y desequilibrar por afuera, gol y experiencia. En tanto, desde la dirigencia del club se informó que Fernández, proveniente de Juventud Antoniana de Salta, se sumaría a las prácticas entre hoy y mañana. En cuanto al central, hasta anoche estaban avanzadas las gestiones para conseguir los servicios de José Figueroa, de 24 años, quien jugó en 9 de Julio de Morteros, pero surgió de Gimnasia de Jujuy, adonde llegó a trabajar con el plantel superior, aunque sin poder debutar en la primera división. Con el arribo de estos jugadores, Alumni se retiraría del mercado, aunque no se descarta la posibilidad de conseguir un volante que juegue por izquierda, algo que necesita Magistretti, más allá de que Fernández puede cumplir esa función. Ayer, sin caras nuevas, el plantel de Alumni practicó en Plaza Ocampo, por la mañana, y en el gimnasio, por la tarde. Los trabajos semanales seguirán hasta mañana y el domingo habrá descanso, ya que se suspendió el amistoso que se había programado ante Bell, en Bell Ville. s Rival en problemas Por otra parte, Talleres de Perico, el primer rival de Alumni en el próximo torneo Argentino A, entró en las últimas horas en un clima tenso y de incertidumbre, después de la renuncia que presentó el vicepresidente de la institución, José Manuel Solá. La noticia causó preocupación porque Solá era un hombre fuerte en la comisión Directiva y, quienes están cercanos al club, aducen que dejó en soledad al presidente Jorge Gurrieri a la hora de reunir los fondos para costear los gastos que ocasiona mantener al plantel. "Solá y Gurrieri eran quienes conseguían el dinero en Talleres, así que ahora todo se complicó", explicó ayer una fuente cercana a la institución jujeña. De esta manera, Gurrieri debió viajar a La Quiaca, donde el plantel realiza la pretemporada, para "hablar con el técnico y decirle que será difícil afrontar el torneo como se esperaba", según explicó la misma fuente. En ese contexto, el entrenador Eduardo Juárez, quien permanece en el cargo pese a las críticas que recibió en la temporada, se mostraba inquieto porque los refuerzos resonantes no llegaban, más allá de la importancia de contar ahora con uno de los preparadores físicos más elogiados del norte, como Juan Fernández. De hecho, el volante Alejandro González (ex Gimnasia de Jujuy) no se sumó a la pretemporada, pese a que desde la dirigencia se había anunciado su contratación. Los jugadores nuevos son Diego Chacón (enganche, de 21 años), Federico Leguizamón (defensor, proveniente de las inferiores de Estudiantes de La Plata), Fabricio Aguilar, Diego Aguirre (delantero, de Independiente Rivadavia de Mendoza), Roberto Paiva (mediocampista, ex Luján de Cuyo) y dos jóvenes provenientes de Rosario Central, Marcos Persig y Juan José Gómez. Además se sumó Cristian Larsen, un delantero ignoto que viene de Guatemala. En tanto, tras el retiro del arquero Luis Campi, llegó Gustavo Coronel, ex Gimnasia de Jujuy, aunque con el panorama negativo que se avecina por razones financieras, ahora su continuidad es una incógnita. Encima, está desarmada la base del equipo que realizó una buena campaña en el último torneo, ya que partieron jugadores importantes como el goleador Wander De Almeida. "Ahora, si hay rebaja de sueldos, es posible que algunos jugadores importantes decidan irse de Talleres después de la pretemporada", se pronostica desde Perico. El conjunto jujeño visitará la ciudad el próximo 24 de agosto, por la primera fecha del torneo Apertura del Argentino A.