Nadie se dejaría operar por un carnicero, ni dejaría que la receta de medicamentos se la escriba el almacenero. Entonces, cabría preguntarse por qué razón adquirimos lentes para el sol e incluso con aumento, a vendedores ambulantes. ¿Es lógico poner en riesgo nuestra visión? La respuesta es no, de manera contundente.
Por eso, es importante recordar hoy, en el Día del Optico, que los técnicos ópticos son los únicos profesionales que pueden vender los lentes recetados y los anteojos para sol.
Los profesionales tienen un código de ética que, en uno de sus artículos, explicita que los “ópticos, técnicos óptico-oftálmico y contactólogo, tienen el deber de combatir el industrialismo, el curanderismo, la charlatanería, utilizando para ellos todos los medios legales a su alcance”.
Establecen también las normas reñidas con la ética, que son las siguientes:
a) Competir deslealmente con otro colega y por otros medios que no sean de estricto carácter científico.
b) Expedir certificados avalando la eficacia de material oftálmico u óptico o cualquier procedimiento terapéutico, excepto en el caso de ser descubridor o creador de ese material o procedimiento y haberlo comunicado a la comunidad profesional, fundamentado científicamente sus beneficios para la comunidad.
Es por eso que, al ingresar a una óptica dirigida por un profesional matriculado, el cliente debe tener la tranquilidad de que va a dejar en buenas manos su salud visual.
Además, cada establecimiento de venta de anteojos y lentes de contacto, debe reunir una serie de requisitos para su habilitación, lo que lo hacen más fiable aún.
Entre esos requerimientos, se encuentran los siguientes:
• Certificado de matrícula expedido por el Colegio de Opticos (con 10 días como máximo, de haberse otorgado).
• El Optico regente deberá estar presente en el establecimiento en forma regular y permanente, en caso de ausencias justificadas, será remplazado por un óptico suplente previamente presentado a la autoridad de aplicación del Ministerio de Salud.
• Exhibir el o los títulos de los Opticos Técnicos responsables en el local.
• Libro recetario actualizado, fichero o respaldo informático previamente presentado en el expediente, el que deberá estar siempre en el local comercial (para óptica y/o contactología).
En definitiva, no es lo mismo comprar a un vendedor ambulante en una casa comercial común los anteojos que en una óptica.
En el Día del Optico, el mejor regalo es confiar la salud de nuestros ojos en profesionales capaces y habilitados.